La historia de Leonard Peltier aterriza en Val di Susa
En 2005 la directora Adonella Marena realizó el primer documental sobre la lucha en Valsusa, el título es ‘No Tav, indios del valle’.
EN 2005 Se publica en Italia la autobiografía de Leonard Peltier: «Mi danza del sol, escritos desde la cárcel».
Dos historias que marchan en paralelo, la primera investiga una lucha que comenzó a finales de los años 80. La segunda sobre cinco siglos de masacres, abusos, injusticias.
Sin embargo, unos y otros defendieron y siguen defendiendo su tierra, sus montañas, sus aguas, su cultura, tratando de oponerse a un supuesto progreso que, en aras del beneficio, pasa por encima del respeto a las personas que lo habitan.
La lucha en Valsusa, Italia, la conocemos bastante bien, sobre todo si vamos al valle para conocer directamente ese movimiento, viendo sus caras, sus formas, su franqueza. La historia de Peltier es menos conocida: nacido en Dakota del Sur en 1944, fue miembro del Movimiento Indio Americano, un movimiento que a finales de los años sesenta logró revivir la dignidad de los pueblos originarios que seguían siendo acosados y burlados por tratados que nunca se respetaron. Ese movimiento fue criminalizado (¿otra analogía?) y golpeado sistemáticamente: encarcelamiento y asesinatos. El 26 de junio de 1975, dos agentes del FBI y un nativo murieron en un terrible tiroteo; a nadie le importó el nativo, pero por los dos agentes alguien tenía que pagar, y muy caro. Peltier fue detenido en Canadá el 6 de febrero de 1976 y extraditado con pruebas tan falsas que el gobierno canadiense protestó formalmente a posteriori, pero para entonces ya estaba en las garras del FBI y consiguieron lo que querían. Si los dos primeros detenidos habían sido absueltos por falta de pruebas y por una condición que en todo caso se reconocía como «defensa propia», Peltier fue juzgado en otro lugar, con un jurado y un juez que se plegaron a las exigencias del FBI: dos cadenas perpetuas para él.
Durante casi 47 años Leonard Peltier ha estado en prisión por un crimen que no cometió, pero el FBI consiguió la venganza que buscaba. Ahora Peltier tiene 78 años, está enfermo y la presión para su liberación vuelve a aumentar, con la esperanza de que Biden firme su puesta en libertad sin esperar al final de su mandato, porque ya sería demasiado tarde.
Pero lleguemos al encuentro de los dos acontecimientos.
Desde hace diez años, uno de los muchos fragmentos de solidaridad con Peltier ha elaborado una larga pancarta que reza: «Liberen a LEONARD PELTIER, a Mumia Abu Jamal y a todos los presos políticos». El 12 de diciembre del año pasado, a lo largo de la procesión por el aniversario de Piazza Fontana (el 12 de diciembre de 1969 un atentado terrorista fascista causó 17 muertos y 88 heridos en el centro de Milán) desfiló la pancarta, pero habíamos añadido dos nombres: Julian Assange y Emilio Scalzo. En ese momento, el primero se enfrentaba a la extradición a Estados Unidos y el segundo a un juicio en Francia por sus actividades como militante de No Tav y en apoyo de los migrantes que intentan cruzar los Alpes.
Cuando me encontré con Emilio Scalzo en Milán el pasado mes de mayo, le conté la historia de Peltier e intercambiamos dos camisetas a las que teníamos mucho cariño, recuerdos de la lucha del No Tav y solidaridad con Leonard.
El 25 de junio, estuve en el plantón de San Didero (1) contando la historia de Leonard Peltier, acompañado por las canciones de Alessio Lega (un cantautor de inspiración anarquista) que había conocido recientemente la causa y no tardó en adherirse a ella. Durante ese encuentro, se sintieron las fuertes analogías entre las dos luchas de resistencia, llenas de similitudes. Al final de la reunión, fue Alberto Perino quien propuso que el plantón en la que estábamos podía llevar el nombre de Peltier. Al cabo de unas semanas, la comunicación se hizo oficial, el movimiento lo había decidido: el plantón llevaría el nombre del símbolo de la resistencia de los nativos norteamericanos.
A finales de agosto, recibí un correo electrónico en el que se me invitaba a colaborar con la Gira Rise Up por Peltier, que tendrá lugar en Europa y hará una parada en Italia a principios de octubre; en el mismo correo, se me preguntaba si podía pasar por Valsusa. La concienciación y la alegría se disparan: incluso en Estados Unidos saben que el plantón lleva el nombre de Leonard Peltier. Y así es: la delegación de tres mujeres americanas, dos de ellas originarias, tras una parada en Ginebra y una recepción en la ONU, se detiene primero en Francia, para conocer el movimiento No Tav más allá de los Alpes, y luego en San Didero, donde se confirma un vínculo que rápidamente ha tomado consistencia.
El 30 de septiembre, en San Didero, hubo muchas emociones: la conciencia de que se han encontrado dos historias que atraviesan el espacio y el tiempo, que ven una hermandad y una armonía profundas. Una cercanía entre las luchas que atraviesan el planeta.
Ahora la gente de Valsusa sabe más sobre Leonard Peltier y participa en la campaña por su liberación, mientras que esas tres mujeres han prometido que contarán en el extranjero que en Italia hay un valle que resiste, que allí también hay «indios del valle».
Para más información: https://www.pressenza.com/it/2022/08/il-presidio-di-san-didero-valsusa-intitolato-a-leonard-peltier/
https://www.pressenza.com/it/2022/10/torino-abbraccia-leonard-peltier/
Lo que hicimos durante cinco años en Barcelona: https://cslpbarcelona.wordpress.com
Sitio web oficial de Leonard Peltier: https://www.whoisleonardpeltier.info/
(1) Andrea De Lotto, del comité de solidaridad con Leonard Peltier, en Milán. https://desinformemonos.org/la-cura-esta-en-la-tierra-la-lucha-en-el-estacionamiento-de-camiones-de-san-didero/
Movimiento No Tav
Las mujeres y los hombres que hacen parte desde hace décadas del Movimiento No Tav en el Valle de Susa, Italia, luchan en contra del tren de alta velocidad por la defensa de su territorio.