Memoriando

Colectivo Híjar

La difícil democracia

Mural comunitario en Av. Aztecas, Pedregales de Santo Domingo, Coyoacán, CDMX

El saludo de los dos cosmonautas rusos al pueblo de México para festejar su independencia, exige precisar el sentido democratizador del primer socialismo triunfante de la historia, justo ahora que la democracia burguesa agoniza entre corruptelas parlamentarias, acuerdos ente partidos antagónicos dispuestos a todo con tal de conservar su cuota de poder patrocinado generosamente por el Estado, ante sobrevivencias fascistas asociadas a monarquías singularmente corruptas como la española y supresión de las elecciones a cambio de reconocimiento parlamentario de dictadores como Bolsonaro en Brasil o Bukele de El Salvador que se autodefine como “el dictador más cool del mundo mundial”. Nadie objeta la tercera reelección de Trudeau en Canadá, la permanencia de Angela Merkel o la aberración de la monarquía constitucional española con un rey en retiro culpable de millonarios sobornos y amoríos ilegales encubiertos por una familia de corruptos privilegiados.

Del lado socialista y luego del ejemplar ejercicio democrático de la Comuna de París en 1871, la construcción de la URSS tuvo que enfrentar ataques militares y paramilitares, campañas y boicots de todo tipo apoyados por catorce estados: Gran Bretaña, Estados Unidos, Francia, Polonia, Serbia, Canadá, Rumania, Italia, China, Checoeslovaquia, Japón, Grecia, Australia. Una coalición fomentó proyectos de estados contrarrevolucionarios en Siberia y en el Cáucaso. Al finalizar 1919, los ejércitos avanzaron con Kolchac al frente por el Volga, Benikin invadió Ucrania y avanzó sobre Moscú, Yudenich lo hizo sobre Petrogrado apoyado por una escuadra inglesa. Hambre, terror, desplazamientos forzados aumentaron con el ataque de Polonia respondido por el Ejército Rojo que avanzó hasta las murallas de Varsovia.

La Internacional Comunista decretó el fin del terror con la derrota de Wrangel en Crimea y con el control de Polonia. La Unión de Repúblicas Socialistas parecía imposible. Lenin advirtió “el cúmulo de desaciertos” agregados al hambre, las malas cosechas y la falta de combustible. Fueron cientos de miles los desempleados y abundante el bandidaje y la corrupción. Pero el Ejército Rojo con Trotski al mando contiene la contrarrevolución al asegurar la producción de petróleo y carbón con el reconocimiento de que “la ciudad no da casi nada a la aldea y toma casi todo de esta”. El comunismo de guerra implicó racionamiento, leva, requisas, militarización del trabajo, centralización apoyada en los soviets bolcheviques.

En Kronstandt, frente a Finlandia, crecieron las asambleas con Kalinin al frente hasta reunir dieciséis mil participantes. Tercera revolución llamaron a la exigencia de tener representación directa en los soviets con libertad a los trabajos sindicales y a la eliminación de las requisas y con licencia a los pequeños productores. Todo esto alimentó el X Congreso con el señalamiento de Lenin sobre el peligro de los guardias blancos que “se disfrazan de comunistas”. Soviets sin bolcheviques demandaron los más derechistas a nombre de la democracia y con la acusación de burócratas a los bolcheviques. Una casta que acabaría por ser clase social estudiada por González Rojo, crecía como peligro en la construcción del socialismo democrático.

La Nueva Política Económica (NEP) fue decidida a toda costa en el X Congreso en Moscú sobre la base de la unidad del Partido apresurado para el control militar por el deshielo que impediría el tránsito del Ejército Rojo sobre la dura nieve, misma que cedió ante los primeros bombazos de los marinos de Kronstandt con la muerte de miles de soldados. La unidad entre Partido y Soviets liquidó la Oposición Obrera de Alexandra Kollontai y rechazó las infiltraciones anarco sindicalistas. Resultado: seiscientos muertos, ejecución sumaria de trece dirigentes, cientos de fusilados y encarcelados, secuestro de familias como rehenes, éxodo de ocho mil sublevados a Finlandia. Trotski denunció la infiltración de agentes contrarrevolucionarios para justificar las medidas extremas.

Democracia participativa abierta sin el control absoluto del Partido, libertad de producción y comercio, fueron planteados contra la acumulación capitalista y la hegemonía burguesa aliada de la vieja aristocracia, todo con pleno apoyo del capital financiero internacional.

Pero la resistencia al control autoritario del Partido, proclamaba la libertad sustentada en las organizaciones obreras y campesinas con los sindicatos organizando a la clase obrera y con la participación en una prensa revolucionaria.

El 18 de marzo de 1921, fue celebrada La Comuna de París aunque hay quien como la anarquista Emma Goldman, notó las graves responsabilidades de Trotski, Zinoviev y Dibenky que le parecieron más graves que las de Thiers y el sanguinario General Gallifet contra La Comuna por ser hechas a nombre del socialismo.

Victor Serge, en cambio, considera de lo mejor la demanda de los marinos “sinceramente revolucionarios y desinteresados” que hubiera prosperado si la NEP hubiera funcionado de inmediato desde 1920. Lo cierto es que la consolidación de la URSS a sangre y fuego y la negociación posterior con el nazismo para sobrevivir, hizo de los soviets direcciones burocráticas resistentes a la participación directa de los trabajadores del campo y la ciudad. Esta es la gran lección de Kronstandt en tiempos de globalización capitalista, con la URSS deshecha sin que Rusia deje de ser potencia mundial. La sacralización del Partido cede ahora ante la organización de “movimientos” sin programa para el largo plazo. A la par, en los mejores casos, de asambleas comunitarias autogestivas con sus propias estructuras de seguridad y reproducción social.

Desde abajo y a la izquierda es la consigna del EZLN para distinguirse de la agónica democracia burguesa y “la transformación desde arriba” sin movimiento obrero, campesino, estudiantil e indígena, fragmentado ante la aparente apertura del Estado negociador que no para en la realización de megaproyectos devastadores que han convertido a las fuerzas armadas en poderosos consorcios empresariales. La justicia imposible se mantiene sistémica ante la permanente violencia contra las organizaciones de resistencia civil y campesina en especial. El Estado-Nación es ahora Estado contra la nación que se mantiene titubeante en las comunidades, los barrios y algunas comunidades defensoras de sus derechos históricos conculcados desde el siglo XVI y con las reformas liberales y neoliberales.

Contra las negociaciones sin más línea política que las promesas incumplidas del Estado socio de los megaproyectos, es que procede la alerta roja precisada por el Subcomandante Insurgente Marcos el 12 de enero de 1994 al referirse a la tregua decretada por Salinas: “nos preparamos para la guerra no para la paz” y sin embargo, a base de sostener firmes principios claros, simples y directos, el EZLN sobrevive y sigue a su manera denunciante y reivindicativo aunque insuficiente para enfrentar a organizaciones como la de los cafeticultores de Ocosingo, ORCAO, con funcionarios de gobierno en Chiapas y estructura paramilitar protegida por el ejército. Oaxaca, Guerrero, las montañas yaquis y Chiapas, sufren una guerra de baja intensidad interminable que da lugar a penosos desplazamientos forzados, ejecución de dirigentes y comisiones incapaces de resolver nada. No llegará de fuera el proyecto democrático revolucionario que tiene que encerrarse en comunidades como Cherán, Ostula, los municipios autónomos zapatistas y los defensores del territorio, el agua, los bosques, las fuentes energéticas y la biodiversidad.

Marcha de la Asamblea de los Pueblos, Barrios, Colonias y Pedregales de Coyoacán.

DEL CAMPAMENTO AL BARRIO

Hace 50 años, un grupo organizado sin casa, decidió ocupar el hostil terreno del Pedregal de Santo Domingo, donde parecía imposible construir sobre las rocas volcánicas. Ni siquiera Diego Rivera con toda su influencia había podido realizar en los treinta el proyecto del Anahuacalli como una ciudad de la cultura y las artes de la que aún existe el edificio central en Huayamilpas cuyos trabajos jamás pudieron llegar hasta el Pedregal de San Ángel.

Largas y duras jornadas en Santo Domingo y hasta Copilco, fueron avanzando hasta la construcción de las primeras casas con improvisadas tienditas, iglesia y el lugar para las asambleas. No faltan en ellas, desde entonces, los tacos y el café de olla en esa solidaridad profunda de las mujeres organizando la comida, el cuidado de los niños, los enfermos, las embarazadas, mientras todos descubren que la salud y la seguridad social es mucho más que la policía y el ministerio público.

Las irregularidades del terreno exigieron una urbanización llena de escaleras, muros de rocas impenetrables que cortan las calles, vías principales ahí donde el gobierno mandó maquinaria pesada como parte de su afán de control predial y con el del derecho al agua, la electricidad, los servicios urbanos como la recolección de basura, la educación, la salud. En todo momento, el barrio fue consolidando un poder vecinal que dio lugar a la famosa Escuelita, con su biblioteca, los murales y la serie de pinturas de Daniel Manrique de Tepito Arte Acá, las iglesias sobre avenidas principales, una de ellas con gran espacio cubierto y un cuidado jardín. Las comunidades eclesiales de base tuvieron importante presencia en la de Avenida Aztecas.

Todo esto entró en crisis a raíz de una serie de licencias concedidas a la empresa QuieroCasa por los impunes delegados de Coyoacán, uno de ellos Mauricio Toledo, prófugo luego de ser diputado. Está en Chile de donde su familia tuvo que salir perseguida por la dictadura de Pinochet. Ha optado por la nacionalidad chilena para evitar su extradición.

Pese a los dictámenes del Instituto de Geofísica y de la Facultad de Ciencias de la UNAM para asegurar la pureza del agua del manantial cegado por la impune construcción de seis torres departamentales con estacionamientos sobre el manantial, que resistió como gran charco al que de inmediato llegó una pareja de patos para animar al campamento de protesta de los vecinos frente a la entrada principal.

Una solidaridad dialéctica creció entre los despojados y perseguidos de Pedregales y los de Atenco que lograron detener la construcción del aeropuerto sobre el lago de Texcoco. Desde la lejana Tijuana llegó la solidaridad de los que lograron detener la cervecera Constellation Brands. Igual ha ocurrido con los opositores al Plan Integral Morelos de Amilcingo que sufren aún el asesinato impune de su dirigente Samir Flores. Más cercanos, los pueblos y barrios de Coyoacán y Xochimilco han constituido un frente en defensa del agua. Nada de esto sería posible sin la figura de una dirigente excepcional, Doña Fili, pequeña, de palabra brillante, al frente de marchas, plantones, campamentos, manifestaciones desde Tijuana hasta Texcoco y Chiapas, Estado de México y Guerrero. Su casa, monumento a la memoria de las luchas populares, es un lugar de homenaje a todo lo ganado desde Zapata, Lucio, Genaro, los Gamiz, los Escobel, el Doctor Pablo Gómez y sus compañeros y por supuesto, el EZLN. No se olvida a Rubén Jaramillo, ejecutado con su esposa embarazada y sus tres hijos, días después de ser amnistiado y abrazado por el presidente López Mateos presionado por una visita del presidente de Estados Unidos y su seguridad.

Los desaparecidos de Ayotzinapa, los asesinados, los perseguidos, los dolientes familiares fueron recordados justo el emblemático 23 de septiembre con un rosario en la casa de la compañera Fili quien ha instituido el reconocimiento de solidaridades con la entrega con honores de una pequeña roca volcánica y un paliacate a quienes son dignos de ser emulados por su ejemplar trabajo político. Una dirigencia política sin concesiones, negocia y tramita, logra la condonación de pagos caducos de electricidad, mantiene claros los objetivos comunitarios y aprende y contribuye con la solidaridad internacionalista y nacional de a de veras, a construir una nación con los principios de independencia y soberanía antiimperialistas. Larga vida de lucha espera a Santo Domingo Pedregales.

Al cumplir veinte años la huelga universitaria de entre siglos, la más larga de la historia, un libro fue presentado al lado de la primer escuela primaria del Pedregal. Se recordó la marcha excepcional de aquel entonces, de Ciudad Universitaria a ese lugar en beneficio de todos, por una educación plena y gratuita. Nada de esto anima el inexistente movimiento estudiantil que quizá marchará rutinariamente el 2 de octubre sin proyecto alguno, viable, de reforma de planes y programas de estudio y de liquidación de la estructura monárquica del poder de la UNAM con una Junta de Gobierno de “notables” representantes empresariales aderezada por algún filósofo, idealista, por supuesto.

El 2 de octubre habría que recordar a Luis González de Alba, el brillante delegado de la Facultad de Filosofía, suicidado el día que nació su vida política que lo llevó a la cárcel donde cultivó un cuerpo de atleta para su orgullosa homosexualidad promovida con escándalos luego de su liberación. Escribió con excelencia Los días y los años como memoria del 68 y publicó relatos brevescon el título El vino de los bravos, ignorado por la crítica literaria adocenada y mafiosa. Su columna de divulgación científica acabó sustituida por un comunismo rabioso y desencantado. El 23 de septiembre murió acusado de traidor y provocador Sócrates Amado Campos Lemus, el orador que llamó a instalarse en el Zócalo para exigir el informe presidencial desde el balcón central de Palacio Nacional para ganarse la entrada de los tanques y los soldados para el desalojo. Américo Saldivar lo recuerda solidario por entregarle una cobija en Lecumberri, pero también por firmar una carta con Carlos Martín del Campo y Marcos Ávila, el 23 de enero de 1969, ofreciendo a Díaz Ordáz sus servicios para dar fin al movimiento estudiantil con un homenaje a su presidencia a cambio de su libertad. Comenta Américo que hay muchos Sócrates Campos al servicio del Estado. Cuidado con ellos.

La celebración del Centenario de la llamada “consumación de la Independencia” sirvió para hacer un llamado a la unidad nacional. Por vez primera, Agustín de Iturbide fue reconocido como gestor principal a cambio de ignorar su origen de propietario de minas en Guanajuato donde los trabajadores recibieron toda clase de maltratos. Ya como militar del Ejército Realista arrasó pueblos enteros, tomó rehenes y asesinó familiares para forzar rendiciones y ante el descontento criollo por la Constitución de Cadiz que alentaba la igualdad y la fraternidad para disgusto de los criollos, hizo lo necesario para acordar con Vicente Guerrero la solución definitiva contra la ya inexistente Corona Española. La entrada del Ejército Trigarante a la Ciudad de México fue reproducida como espectáculo con personal militar disfrazado a todo lujo, algunos montados en los finos caballos del criadero de Santa Cecilia en Chihuahua, sin que faltaran los indios de plumas y taparrabo con torsos atléticos improbables en los indios verdaderos y con ejércitos populares que se soltaron bailando disfrazados de mariachis y las mujeres con faldas que en sus giros dejaban ver sus piernas como nunca ocurrirá entre las campesinas porque no usan calzones y si bailan lo hacen con elegante discreción. Mención menor recibió el Ejército de Vicente Guerrero que debió incluir negros y “pintos” por las manchas del vitíligo. Hijo de negro y mestiza, Guerrero tuvo que lucir entonces y ahora para quedar bien con los prepotentes criollos, uniforme militar con los dorados y colgajes que tanto gustan, a cambio del traje de campo de jefe guerrillero constructor con Guadalupe Victoria de la logia Águila Negra como núcleo político que llevó a la presidencia a quien mantiene, hasta en los libros oficiales, su seudónimo guerrillero. Único caso en la historia de América. Empezó bien la República con la presidencia de Guadalupe Victoria seguida por la de Vicente Guerrero, pese al paso atrás del pretendido imperio del oportunista Agustín de Iturbide justamente fusilado cuando pretendía regresar al poder. La historia es la historia de la lucha de clases no de la ficticia unidad nacional entre los ricos expropiadores del Estado y los pobres en resistencia antigua, constante y combativa. La soberanía que “reside” en el “pueblo” según la Constitución Política es un proceso histórico dialéctico porque el pueblo no está ahí sino hay que construirlo con plena conciencia de su sentido histórico.

Difícil la construcción del pueblo revolucionario ante los setenta años de Televisa que mide el tiempo histórico por las telenovelas. Trasnacionales como la acumulación imperialista, las telenovelas como “Los ricos también lloran” renovada en estos días, hizo que el nombre Verónica cundiera en Rusia, China, Medio Oriente y América, a la par de la exaltación de la familia, la propiedad privada y el Estado como valores supremos de la humanidad, de aquí los privilegios de condonación de más de ochocientos millones de pesos en un año por el Estado cuyos gobiernos han contado con la complicidad de Televisa para falsear la historia. Al rector histórico del 68, Javier Barros Sierra solo hay que reprocharle la renuncia al Canal 13 que a la larga dio lugar a TV Azteca como grandes consorcios llenos de privilegios, con la hija de Salinas encabezando la diputación que protege los intereses de la poderosa empresa. Son parte del enemigo histórico de la soberanía y la independencia.

Colectivo Híjar

Colectivo cultural y político dedicado a la elaboración de mantas y gestión de acciones por la memoria en México. Participa en actividades y publicaciones sobre la crítica y la memoria históricas y la praxis estética necesaria.

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