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México. La constante en los megaproyectos impulsados por empresas nacionales e internacionales, coinciden en entrevistas comuneros y ejidatarios indígenas de Jalisco, Durango, Guerrero, Oaxaca, Distrito Federal y Michoacán, es que se planean o ponen en marcha sin consultar a los pueblos, bajo las consignas del “progreso” y el “desarrollo”, y teniendo como consecuencia inmediata el despojo y la destrucción de sus territorios, es decir, de su cultura, de sus recursos naturales, de sus sitios sagrados y de sus tradiciones. En pocas palabras, la destrucción de la vida.
En el siguiente reportaje se aborda la amenaza de 22 concesiones mineras otorgadas a la empresa canadiense First Majestic Silver, sobre el territorio sagrado del pueblo wixàrika, en el municipio Real de Catorce, San Luis Potosí.
Por otro lado, comuneros del pueblo purhépecha de las comunidades de Nurío y Cherán y del municipio de Uruapan, ofrecen testimonios sobre la invasión de cultivos de aguacate transgénico, además de la invasión de tiendas departamentales como Wal-Mart y Soriana en su región.
De la Costa-Montaña y de la Sierra Madre del Sur, en Guerrero, hablan representantes de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias (CRAC)-Policía Comunitaria, y denuncian que diversas empresas mineras internacionales tienen ya autorización del gobierno mexicano para exploración y explotación hasta por 50 años en esas áreas.
José Luis Claro Rosales, miembro de la comunidad coca de Mezcala, menciona por su parte la amenaza siempre latente de privatizar el corazón de su pueblo, que es la isla de Mezcala, en el lago de Chapala, el más grande de México.
En el Istmo de Tehuantepec, refiere Carlos Manzo, “se han colocado alrededor de 500 aerogeneradores, como parte del proyecto de producción de energía eólica impulsado desde hace más de 10 años por empresas españolas transnacionales”.
Deforestación, pérdida de especies, mortandad de aves, así como la desecación de suelos, contaminación por derrames de aceite y destrucción del paisaje, son tan sólo algunas de las graves consecuencias en que se traduce un megaproyecto energético de este calibre.
Y en Santa María Ostula, Michoacán, los planes contemplan carreteras, puentes, proyectos turísticos y programas de privatización de tierras. El proyecto carretero, explican los comuneros de Ostula, es parte del Plan Regional Sustentable de Michoacán, y contempla la construcción de una autopista, hoteles y fraccionamientos residenciales sin consultar a la comunidad.
Finalmente, en Milpa Alta, Distrito Federal, está contemplada la construcción de una carretera a Metepec, Puebla, que “afectará nuestro territorio nahua, nuestros bosques, nuestra flora y fauna, y dividiría a nuestra comunidad, no sólo geográficamente, sino en la unidad, pues unos estarán en contra o a favor y eso afectará la paz interna”.
La autonomía y la organización colectiva es la respuesta a estos programas, coinciden todos los entrevistados. Los recursos naturales, la vida y el territorio son los que están en juego. Y no están dispuestos a cederlos.
Todas las entrevistas que contempla este reportaje fueron realizadas durante el Congreso Nacional Indígena (CNI), celebrado en la comunidad coca de Mezcala, los días 5 y 6 de febrero de 2011.
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Publicado el 01 de Marzo de 2011
Gracias por el reportaje. Nos trae las informaciones y nos hace refletir sobre ese ataque de los mega proyectos que vino impulsado por el presidente/a de lo que algun día llamávamos «izquierda» en brasil.
Hace 500 años, la historia nos relata como fueron sometidos culturas americanas, todas ellas indigenas en pro de la civilización, tratando de borrar toda huella de identidad y tradición, se impuso una nueva ideología, y hoy seguimos padeciendo de esos males y lo más lamentable, nuestras propias autoridades son complices de esa intención, en pro del progreso que tiene más que ver con cuestiones económicas paraunos cuantos y seguir borrando tradiciones ancestrales. Dejemos de ser un pueblo sin memoria para no permitir que se sigan socavando nuestras raices. Chikahua
Buen reportage en general, pero no coincido con el tema de las carreteras, en muchos casos ayudan a sacar los productos agricolas producidos por campesinos y ayudan a hacerlos llegar a los mercados. Por otro lado, cuando alguien enferma hacen mas facil el traslado de los enfermos graves a hospitales en ciudades cercanas y en muchos casos ayudan a salvar sus vidas. Hay pros y hay contras.
Bien por la informacion acerca de los efectos negativos de la mineria hacia la madre tierra!
Sigan escribiendo!
Esta muy bueno el informe, pero siento que hasta que no dejemos de alimentar este sistema de comodidad e individualismo, nunca terminaran los atropellos de aquellos que viven con muy poco, porque en verdad no necesitamos ni oro ni plata, ni carreteras ni plástico y petroleo, creo que hasta que no dejemos de depender de estas cosas jamas cesaran estos acontecimientos,la realidad es que hoy en día todo lo que nos rodea esta creado por la minería, cualquier metal que necesite mi computadora para poder escribir estas palabras, tendríamos de cambiarlo todo y vivir de otra manera mas simple y saludable. gracias por la información.
Compartimos:
Carta a los senadores para que promuevan punto de acuerdo en Defensa de #Wirikuta y Voto para el Frente en Defensa de Wirikuta nominado en Derechos Humanos en los premios Bobs. Gracias!
http://salvemoswirikuta.blogspot.com/2011/03/carta-los-senadores-de-mexico-y-voto.html
Gracias.
Soy una mexicana que ha conocido o vivido en muchos de estos lugares y que ha tenido la buena suerte de conocer a su gente y me duele muchísimo lo que he oído. Espero poder hacer algo desde aquí, desde Alemania.