Ciudad de México, 3 de febrero de 2015. En la mañana de hoy, efectivos de la policía a bordo de cuatro buses y una veintena de camionetas, destruyeron la casa que Máxima Acuña de Chaupe y su familia venían construyendo en Cajamarca, Perú. La represión y violencia contra la campesina, no cesa por parte de Policía Nacional peruana y grupos de seguridad privados de la minera Yanacocha, quienes durante cuatro años han intentado despojarla de su territorio, a pesar de que hace unos meses una sala judicial emitió una sentencia favorable para que la empresa no continuara con los hostigamientos contra esta familia que se niega a vender su tierra a una de las mineras de oro más grandes de Latinoamérica.
Según informó Máxima Acuña, en el portal Servindi, los grupos de seguridad los acorralaron, mientras que los trabajadores de la minera destruían la casa que estaban construyendo. Esta es la segunda agresión contra la familia en lo que va del año, el pasado 20 de enero para prohibirles cualquier trabajo de mantenimiento de la casa y alguna actividad agropecuaria.
Desde el 2011 la minera a presionado a la familia Acuña Chaupe para que vendan sus terrenos y ante la negativa de estos, la empresa, propiedad de Newmont Mining Corporation de los EE.UU., Compañía Minas Buenaventura del Perú y Banco Mundial, la demando a ella y su esposo por usurpación de tierras. La sala judicial de Cajamarca los sentenció a dos años y ocho meses de pena preventiva y el pago de una multa por reparación civil a la minera, revocando la sentencia el 17 de diciembre.
Acuña de Chaupe y su familia son una de las pocas que permanecen en las cercanías de la Laguna Azul al norte de Perú, terreno deseado por el proyecto minero.
Máxima Acuña, es una mujer recocida por su fortaleza y resistencia contra las empresas extractivas que quieren despojar a los pueblos de sus territorios para poder llevar a cabo sus objetivos. La campesina fue nombrada como la defensora del año, por la Red ULAM que entrega este reconocimiento a las luchas de mujeres defensoras de la tierra, agua y derechos humanos de los impactos de la industria extractiva.