El 3 de noviembre de 1991, en la cuadra 8 del jirón Huanta, en Barrios Altos, en el centro de Lima, encapuchados con fusiles HK irrumpieron en la casa donde se realizaba una fiesta. Dispararon de forma indiscriminada y mataron a 15 personas, entre ellas un niño de ocho años. Hubo además cuatro heridos de gravedad.

De forma inmediata, la presunción acerca de la autoría de la matanza se atribuyó a un presunto grupo terrorista que había asesinado a los vecinos de Barrios Altos, vendedores ambulantes de helados en su mayoría, porque eran militantes de Sendero Luminoso que organizaban la fiesta para recaudar fondos.  Esta situación nunca fue probada, ya que en muy poco tiempo, las investigaciones llevaron a que el grupo paramilitar Colina cometió el múltiple asesinato.

Placentina Chumbipuma, Luis Alberto Díaz, Octavio Huamanyauri, Luis Antonio León, los hermanos Filomeno y Máximo León, Lucio Quispe, Tito Ramírez, Teobaldo Ríos, Alejandro Rosales, Nelly Rubina, Odar Sifuentes, Benedicta Yanque, Manuel Ríos y su pequeño hijo, fueron los muertos.

El mismo noviembre en que aconteció la matanza, se formó una comisión investigadora que se frustró debido al cierre del congreso por el autogolpe de Alberto Fujimori, presidente de Perú,  ocurrido el 5 de abril de 1992. Con los años, se comprobó que los culpables fueron los integrantes del mencionado grupo paramilitar Colina, liderado por el mayor Santiago Martín Rivas, preso también.

El 7 de abril de 2009, Alberto Fujimori, expresidente de Perú, fue condenado a 25 años de prisión por los delitos de violación a los Derechos Humanos por dos matanzas: la de Barrios Altos y la de la Cantuta, así como por el secuestro de un periodista y un empresario.  La sentencia fue ratificada en 2011.  Estas matanzas dejaron 25 muertos. El grupo paramilitar cometió 50 asesinatos en 15 meses de actividad

Tras dieciocho años de proceso, el 1 de octubre de 2010, sentenciaron a 25 años  de prisión  al ex asesor presidencial Vladimiro Montesinos y a otros integrantes del Grupo Colina.