Empresas turísticas y misioneros evangélicos asentados en la comunidad nativa Diamante vienen tomando contacto con indígenas aislados del sector conocido como Yanayacu en el río Alto Madre de Dios en la provincia del Manu.

Así lo denunció el lunes 8 de setiembre la Federación Nativa del Río Madre de Dios y afluentes (FENAMAD) quién sostuvo que la situación contraviene las normas nacionales e internacionales que protegen a los pueblos indígenas en aislamiento.

El hecho lo verificó el 6 de setiembre miembros del equipo Ejecutor del Contrato de Administración de la Reserva Comunal Amarakaeri (ECA-RCA) mientras retornaban de un viaje a la zona alta, en un bote del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).

Al bajar por el río alrededor de las 10 de la mañana observaron en la playa a un grupo de personas y a un bote de una empresa turística que emprendió la retirada al verlos llegar. Minutos antes otro bote turístico también estuvo en la zona.

En la playa solo quedaron cinco jóvenes, la señora Nelly de la comunidad de Diamante, una misionera evangélica y cinco menores indígenas aislados ataviados con polos.

La señora Nelly respondió que ella siempre les lleva plátanos siempre que los aislados le piden, pero que las empresas turísticas serían las que les entregan ropa. Los cinco niños se encontraban en la playa, mientras sus padres cazaban o mitayaban en el bosque.

Los dirigentes del ECA, recordaron al grupo de hermanos de la comunidad Diamante que está prohibido por ley contactar a los aislados y entregarles alimentos u otros productos. No solo se les puede contagiar de enfermedades sino crearles dependencia y mendicidad. También les advirtieron que no pueden obligarlos a bañarse.

“Nosotros hemos estado al frente más de una hora para ver lo que pasaba. Los hermanos aislados gritaban cada vez que pasaba un bote. Según informaciones, piden machetes, ollas y plátanos, no quieren ropa, se la ponen un rato y luego la botan. A veces incluso les dejan gaseosas y cerveza”, narraron.

Inacción e inoperancia del Estado peruano

El dirigente de FENAMAD, César Augusto Jojajé, expresó su preocupación y molestia por este tema y cuestionó la inoperancia del Estado y especialmente del Viceministerio de Interculturalidad para tratar este tema.

“No hay presencia del Estado en este sector. Queremos que las autoridades asuman su responsabilidad y ejecuten el plan de cumplimiento, en uno de cuyos puntos se establece la integralidad territorial del pueblo Mashco Piro”, exigió.

Al tomar nota de esta denuncia, FENAMAD procederá a actuar según las normas y denunciar a los que resulten responsables por lo que calificó un contacto forzoso que trasgrede peligrosamente el principio de no contacto.