Ciudad de México | Desinformémonos. Durante toda la noche permanecieron frente a Palacio Nacional decenas de madres y familiares de víctimas de feminicidio y desaparición, exigiendo justicia para sus hijas y la búsqueda de quienes no se sabe su paradero. La velada de protesta incluyó la proyección de cuatro mil nombres de mujeres asesinadas en México en la fachada de la sede presidencial.
Después de 12 horas de micrófono abierto en el que expusieron sus casos alternados con ofrendas, performance, música y danza, hoy, al filo de las seis de la mañana, mientras ingresaban los periodistas a la mañanera presidencial, las madres pidieron entrar, pero el paso les fue negado. “Vamos a volver”, advirtió Tranquilina Hernández, madre de Mireya Montiel, desaparecida en Morelos, al tiempo que aseguró que están “cansadas” de que el presidente Andrés Manuel López Obrador las descalifique, las llame “conservadoras” y las acuse de pertenecer a algún partido político de oposición, “cuando él mismo nos recibió hace dos años, al inicio de su gestión, y nos aseguró que todos los casos serían resueltos”.