Valencia, España. Durante muchos años fueron los NI-NI (ni estudian, ni trabajan), término acuñado por los medios para referirse a esas nuevas generaciones de jóvenes, de entre 14 a 18 años, a los que calificaban sin pudor de vagos, golfos, maleducados y demás bonitos piropos. De lo que los medios no hablaban mucho era del estado real en que se encuentra la educación en este país. Muchos de estos chavales han pasado gran parte de su periodo escolar en barracones de obra, han visto como la universidad se privatizaba a la carrera, como la FP (Formación Profesional) apenas ofertaba plazas y el paro juvenil se situaba en el 50 por ciento. Éste ha sido el caldo de cultivo durante años, en los tiempos en que la corrupción campaba a sus anchas amparada en grandes mayorías de devotos ancianos. Hoy los “Ni-Ni” han salido a la calle, llevan dos semanas de movilizaciones, están arrastrando a sus mayores y haciendo replantearse a la sociedad muchas cosas.
El miércoles día 15 de febrero los chavales del instituto Luis Vives, en pleno centro de la ciudad, salieron a manifestarse. Su intención era cortar el tráfico al mediodía para protestar por los recortes que están sufriendo en educación los institutos. Entre otros: la reducción de personal docente, las deudas de la administración que han provocado cortes de luz y de calefacción, de servicio de comedor e incluso de papel para fotocopias. La protesta no autorizada fue abortada por la policía antidisturbios arrastrando a los chavales por la calle y llevándose a un detenido. La respuesta no se hizo esperar y durante los dos días siguientes los jóvenes cada vez más numerosos por el apoyo de estudiantes de otros institutos, salieron a cortar el tráfico nuevamente y llegaron a manifestarse frente a las comisarías de policía de la ciudad. Hubo cargas con heridos graves y se produjeron más de 15 detenciones. En la mayoría de los casos eran menores.
Tal vez muchos pensaron que tras el fin de semana los ánimos reivindicativos se desinflarían. Nada más lejos de la verdad, esa noche todos los telediarios nacionales abrirían con lo ocurrido en Valencia durante la jornada del lunes. Ya a medio día al menos un par de furgones de policía rodeaban el instituto Luis Vives, a un paso de la plaza del ayuntamiento. Desde unos de los balcones del instituto un grupo de chavalas anunciaba: “Hemos convocado a las tres menos cuarto”.
Efectivamente a las tres de la tarde un numeroso grupo de estudiantes cortaba el tráfico de nuevo sin autorización. Cuando la policía decidió que la concentración debía acabar para restaurar el orden y la seguridad, esto es restablecer el tráfico, los jóvenes todavía no estaban satisfechos. Así que al verse rodeados por los antidisturbios decidieron continuar la protesta marchando en contra dirección por las calles donde el tráfico seguía fluyendo, lo que desconcertó a la policía que no podía avanzar con sus furgones. De esta manera con los jóvenes marchando sin rumbo fijo y la policía persiguiéndolos sin poder cercarlos, se inició un correcalles por todo el centro de la ciudad que duró más de cinco horas. Incapaces de controlar la situación los antidisturbios perdieron los papeles cargando contra todo aquel que tuvieran a su alcance, provocando decenas de heridos, realizando detenciones y en ningún caso pudiendo restablecer ese orden y esa seguridad que para ellos supone el tráfico de vehículos. Como se reconoció después por el mismo SUP(Sindicato Unificado de Policía) se intentó “matar moscas a cañonazos” provocando un caos mucho mayor que el que pretendían controlar.
Ya avanzada la tarde varios padres de alumnos y profesores se congregaban a la puerta del instituto. La policía que seguía sin poder controlar la situación, cargó también contra ellos y comenzó a avanzar con sus furgones frenando a escasos metros de los chavales que seguían en la calle. Se oyeron también disparos y el ambiente fue de caos. Profesores de varios institutos de la ciudad se desplazaron hasta el Lluis Vives cuando se enteraron de lo que estaba pasando. Algunos se expresaban así. “Son las mismas imágenes de hace 40 años con la policía franquista, vergüenza les tenía que dar pegarles a los niños”. Hay que recordar que fueron siempre los chavales quienes se juntaron en asamblea durante los recreos y quienes convocaron las concentraciones para asombro de sus padres, sus profesores y del resto de la ciudadanía. Una madre nos lo contaba: “he preguntado a mi hija y me ha dicho que se han juntado en el recreo y han decidido salir. Pero no hay derecho a que la policía responda de manera tan brutal, los han perseguido, buscándolos, deteniéndolos y golpeándoles durante todo el día.”
Por la noche las protestas se desplazaron a la zona universitaria de Blasco Ibañez. Varios jóvenes se encerraron en la facultad de Historia donde se reunieron en asamblea para decidir seguir con las movilizaciones. A la entrada, colgaba una pancarta donde se podía leer: “La razón de la fuerza vs la fuerza de la razón.” Al final de la jornada hubo por lo menos 25 detenciones más, varios de ellos menores y un sinfín de agresiones del que se desconoce el número exacto de heridos.
La respuesta violenta y desmesurada de la policía aporreando a chavales de instituto provocó imágenes que desataron la indignación social en todo el Estado. En Valencia los ánimos se calentaron más con las declaraciones del Jefe Superior de Policía(cercano al partido ultraderchista España 2000) en que en actitud desafiante se refería a los chavales como “el enemigo”. La policía quedó totalmente desacreditada y desde arriba se dio orden de guardar las porras.
De este modo multitudinarias protestas se repitieron durante toda la semana, con escasa presencia policial. En todo el Estado hubo marchas parecidas en solidaridad donde prácticamente no hubo noticias de incidentes. Sí se denunciaron en Valencia acciones absolutamente miserables de la policía nacional apaleando a jóvenes en calles aisladas cuando regresaban a casa tras las movilizaciones. Otras denuncias contra la policía tuvieron que ver con el apropiamiento totalmente ilícito de los partes de lesiones de los estudiantes que se consiguieron irrumpiendo en varios hospitales de la ciudad.
Para hacerse bien a la idea de lo sucedido, deben pensar en chavales de instituto, de esos que hacen el chorra todo el tiempo, que ya no son niños, que tampoco quieren ser mayores; chavalas de esas con toda la vida por delante que han visto que se les maltrata. Los centros a los que se les obliga a ir para ser ciudadanos de bien, no tienen calefacción en invierno y escasea hasta la tiza de la pizarra… No paran de oír que no hay trabajo y muchos lo ven en sus casas. Luego cuando salen a la calle a protestar los tratan como gente peligrosa, con ruindad, desprecio y violencia. Les golpean sin piedad y detienen a sus compañeras.
Las últimas movilizaciones se produjeron el pasado día 29 de febrero, donde los chavales convocaron una huelga general en toda la enseñanza secundaria que fue seguida también por gran parte de la universidad. Han sido dos semanas de movilizaciones de las más multitudinarias que se recuerdan en esta ciudad. Durante la jornada de huelga entrevistamos a varios de los protagonistas, entre ellas a Beatriz, representante estatal del sindicato de estudiantes. “Recortan en educación porque dicen que no hay dinero, pero vemos que sí lo hay para los bancos y para las corruptelas de la clase política”. Y antes de acabar quiso recordar que “los chavales han dado una lección a toda la sociedad y son una inspiración para todos.”
http://radiomalva.org/2012/02/24/jovenes-asaltados-por-policias-mientras-volvian-de-la-protesta
http://radiomalva.org/2012/02/29/29f-valencia-los-estudiantes-toman-la-universidad-y-el-pueblo-las-calles/
http://www.barriodelcarmen.net/buenaventura/actualitat/campanyes/972-estudiantes-sin-futuro-desde-el-17n/3748-carrega-policial-dalumnes-de-lies-lluis-vives-de-valencia.html
http://theplatform.nuevaradio.org/index.php?blog=4&p=1165
http://theplatform.nuevaradio.org/index.php?blog=4&c1=70&c2=43&c4=89&rec=1
Publicado el 05 de Marzo de 2012