Las manifestaciones que se realizaron ayer en al menos veinte ciudades francesas contra la reforma laboral fueron reprimidas por la policía con gases lacrimógenos y bloqueos, además de que dejaron unos 120 detenidos.

Este jueves se realizaron diversas protestas contra el proyecto de reforma que pretende hacer “ajustes” a la jornada laboral de 35 horas por semana, con la justificación de que su fin es reducir el 10 por ciento de desempleo.

Siete sindicatos y algunas agrupaciones estudiantiles convocaron a protestar en distintos puntos del país, como continuación de la jornada de protestas nacionales que iniciaron en el mes de marzo.

La última movilización antes de la del día de ayer fue el 14 de abril, la cual culminó con detenciones e incidentes violentos entre manifestantes y miembros de la policía que lanzó gases tóxicos.

Las manifestaciones cuentan con la participación de estudiantes, trabajadores del transporte público y ciudadanos en general, pues al menos el 70 por ciento de la población se opone al proyecto, apuntó un sondeo Odoxa.

Con información de agencias