Peto, Yucatán. Desde muy temprano, Paalil k’iin acompaña a su abuelo Alejandro Cen Ku, de 79 años, a la milpa, ya sea en temporada de siembra, para leñar o para limpiar la maleza que compite con los retoños. “Me gusta ver a la Madre Tierra y estar ante el silencio de la naturaleza, respirar el aire sin contaminación”, dice el joven maya al tiempo que evoca a las manos de su abuelo portando tres semillas: maíz, frijol y calabaza. Su línea de vida se construye desde la milpa; para sembrar en forma de espeque se tiende un camino imaginario por el que cada dos pasos se van sembrando las semillas.
Carlos Cen, mejor conocido como Paalil k’iin (hijo del Sol), al igual que muchas personas en el territorio maya aprendió español por necesidad, para poder comunicarse en otros espacios y en otros estados. A los 13 años decidió materializar el sueño de dedicarse a la música y, en especial, al hip-hop. “Sin territorio no hay identidad”, dice un verso del rapero maya, quien pone sobre la mesa temas urgentes y esenciales de su pueblo. Desde su natal Tahdziú, Peto, en el estado de Yucatán, escribe desde hace más de cinco años sobre el mundo que considera ideal, sin echar en saco roto sus preocupaciones actuales: el alto nivel de contagio por la pandemia de la COVID-19 y los cambios acelerados que sufre la Península de Yucatán por el despojo de tierras ante la llegada de diversos megaproyectos.
Escucha el rap «Sin territorio no hay identidad» – Paalil k’iin e Ima Felini
Escucha el poema «Cuando venga el Tren Maya», de Pedro Canché, aquí