La aviación israelí ha bombardeado este sábado dos objetivos en la Franja de Gaza sin que haya que lamentar víctimas. El ataque es una represalia por el lanzamiento de un cohete contra territorio israelí.
El primer ataque israelí fue en Jan Yunes, en el sur de la Franja de Gaza, concretamente contra una base de las Brigadas Ezzedin al Qassam, brazo armado del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás). Helicópteros israelíes lanzaron dos misiles contra la base.
Uno de ellos impactó en su interior y otro cerca del acceso principal y han causado daños materiales de escasa consideración, según ha informado la agencia de noticias palestina Maan, que cita a testigos presenciales.
El segundo ataque ha sido en el norte de la ciudad de Rafá, fronteriza con Egipto. Un helicóptero lanzó un misil que impactó en un descampado cercano a una base de las Brigadas An Nasser Salá Addin, brazo armado de los Comités de Resistencia Popular. No hay heridos.
«Aviones israelíes han atacado una base terrorista y un depósito de armas situados en Gaza», ha informado el Ejército israelí en un comunicado oficial. Este bombardeo es una «respuesta al lanzamiento de cohetes» y «se han confirmado impactos directos».
Estos bombardeos son en represalia del lanzamiento de un cohete que impactó en la región de Sdot Neguev, según el Ejército israelí. El pasado miércoles un miliciano palestino murió en un nuevo bombardeo israelí sobre la Franja de Gaza.
