Video: Tomás González Castillo
A siete años de la masacre de San Fernando, Tamaulipas, en la que 72 migrantes murieron y sus cuerpos fueron tendidos en la bodega del rancho El Huizachal (video), el caso aún sigue en la impunidad, pues no se ha identificado ni detenido a ninguno de los responsables, así como tampoco se ha acatado la línea de investigación sobre la posible complicidad de la policía, la cual ya sabía de las agresiones contras las víctimas y no actuó para prevenir sus muertes.