México, DF. 27 de enero de 2015. La postura de los padres es que no vamos a permitir que concluyan o cierren las investigaciones. Seguiremos insistiendo y vamos a mantener esta lucha hasta las últimas consecuencias, hasta que no se nos demuestre de manera científica que los mataron, porque vivos se los llevaron y vivos nos los van a entregar, advirtió Felipe de la Cruz, vocero de los padres de los normalistas desaparecidos hace cuatro meses en Iguala, Guerrero, en respuesta a la versión reiterada hoy por la Procuraduría General de la República (PGR), de que sus hijos fueron asesinados y quemados en el basurero de Cocula.
Padres, madres y compañeros de los 43 normalistas de Ayotzinapa ofrecieron esta noche una conferencia de prensa para fijar su postura frente a las declaraciones del procurador de la República, Jesús Murillo Karam, quien un día después de que se realizaran movilizaciones en más de cien ciudades del mundo, insistió en la versión gubernamental de que los estudiantes fueron asesinados por el crimen organizado en complicidad con policías locales, y con esto prácticamente cerró el caso.
Por su parte, Vidulfo Rosales, abogado del Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan, señaló que el gobierno tiene prisa para cerrar una investigación que no es concluyente
A la investigación, insistió, le falta mucho para ser una verdad histórica, como dijo el Procurador.
Dada la práctica de fabricar delitos de la procuradurías, no confiamos en sus peritajes, hasta que no sean revisados por peritos independientes. El detenido conocido como El Cepillo no estuvo presente en todos los hechos, de acuerdo con su propia declaración, señaló el abogado, quien reclamó que no se impute el delito de desaparición forzada a los implicados.
El representante legal de los padres de los normalistas dijo que no se puede cerrar la investigación porque no hay certeza de que Alexander Mora falleció en el basurero de Cocula, y no hay pruebas de que los otros 42 estudiantes estén muertos. Hay una gran cantidad de aspectos que aún no han sido esclarecidos, como por ejemplo, citó, hay denuncias de tortura de algunos detenidos; no se ha resuelto el asesinato del joven Julio César Mondragón y aún sigue prófugas varias personas que podrían ayudar a entender lo que le ocurrió a los estudiantes de Ayotzinapa.
En la conferencia nocturna, el vocero de los padres y de las madres, Felipe de la Cruz, rechazó de manera tajante la versión gubernamental y la manera descarada de querer cerrar el caso. Asimismo, reclamó la violación de los acuerdos con la presidencia de la República, que obligaban al gobierno a dar a conocer primero a los padres cualquier avance en las investigaciones, lo cual no ocurrió.
No les importa el daño causado a las víctimas, dijo el vocero de los familiares, y reiteró que las conclusiones de la PGR no se basan en pruebas científicas o nuevos elementos, sino en testimonios ya conocidos. Nosotros, nuestros abogados y los estudiantes continuaremos esta lucha hasta que lo demuestren con pruebas científicas, indicó de la Cruz.
El procurador, reclamó, no informó que la PGR sabe que el Ejército conoce los nexos entre el crimen organizado y autoridades de Cocula desde 2013, y además, dijo, hay personajes políticos de Guerrero señalados que no han sido investigados como responsables de la desaparición forzada.
Por su parte, Epifanio Álvarez, otro de los padres, sostuvo que a los 15 días uno de los teléfonos de los estudiantes timbraba todavía, lo cual desmonta la versión de que fueron asesinados y calcinados con todo y sus celulares. Al gobierno, indicó Álvarez, le urge cerrar el caso por las próximas elecciones».
Extrañamos su voz, un abrazo de nuestros hijos», dijo por su parte Cristina Bautista, madre de Benjamín, otro de los normalistas desaparecidos. «Que tengan un poco de vergüenza esa bola de corruptos», reclamó Carmen Cruz, otra de las madres, quien añadió que el batallón de Iguala hizo bloqueos el día de la desaparición. Están acostumbrados a que sus crímenes queden impunes, pero esta vez no será así, advirtió.
«Ahora vengo con más coraje…No se vale que Enrique Peña Nieto se burle de nosotros. Sólo nos está arrimando fosas y muertos», lamentó Clemente, otro padre, quien aseguró que no fueron quemados: nos quieren engañar diciendo que están convertidos en cenizas, pero la lucha no va a parar, insistió.
Las instancias internacionales de justicia serán las siguientes puertas que toquen los familiares de los normalistas de Ayotzinapa, quienes advirtieron que aunque son amenazados su lucha no terminará hasta que les regresen a sus hijos con vida.