Ciudad de México, 21 de mayo del 2015. La comunidad wayúu, ubicada en el extremo nororiental de Colombia, está siendo exterminada ante el silencio de todo un país. Una empresa minera privatizó el río Ranchería, único en la región, que fue represado y ahora está totalmente seco.
La falta de agua en una zona semidesértica y con muy pocas lluvias ha cobrado la vida de más de 14 mil menores de edad, según datos de los indígenas. Muchos de los pequeños presentan resequedad en la piel, su cabello se cae, algunos presentan llagas en el cuello y peladuras en sus partes dentales.
A pesar de ser una zona con gran extracción de carbón y gas, las comunidades indígenas no cuentan con los servicios básicos y esta actividad sólo genera afectaciones a la tierra, a la cultura de las comunidades, pobreza y despojo.
Mineras como el Cerrejón, que extrae carbón a cielo abierto, se están llevando lo poco de agua que queda para estas comunidades. Con una ausencia total del Estado, éstas exigen que el gobierno detenga el exterminio de su pueblo.