La abundante presencia de personal del cuerpo de Guardias Presidenciales con policías federales y del Distrito Federal, resguardando los alrededores de la Cámara de Diputados, intimidó a un grupo de jóvenes del Frente Social por la Igualdad que pretendían hacer una pinta contra Enrique Peña Nieto en las planchas metálicas con las que fue cercado el palacio legislativo de San Lázaro, pero no los disuadió.
Su objetivo eran las vallas que cierran el accesos al Eje 2 Oriente, Congreso de la Unión, por la calle Emiliano Zapata, pero además de los uniformados de las antedichas corporaciones, permanecían en ese punto varias personas más, vestidas de paisano y con apariencia de trabajadores, pero sobresalían en sus mochilas radios de comunicación.
Al encontrar otro punto del cerco en el que sólo guarecían la valla tres guardias presidenciales en el lado opuesto, consiguieron plasmar su inconformidad con dos pintas: Peña compró la presidencia
y La Constitución ha muerto
, antes del arribo de dos camionetas de la policía del DF que se anunciaron con el rechinar de las llantas al frenar.
Ya está hecho guardia
, le dijo uno de los policías a los tres militares tras la valla una vez que retiró a los jóvenes del colectivo con la advertencia: si no me los llevo a la delegación
.
Nosotros también cumplimos
, diría Fernando Corzo, integrante del colectivo que se encargó de trazar las frases con brocha y pintura blanca.
Antes, había entregado a dos de sus compañeros, Yesenia Ramos y René González, sus identificaciones personales, su IFE y la credencial de estudiante de la UAM, por si lo detenían para remitirlo al juzgado cívico, como ya le pasó alguna vez.
Queríamos manifestar nuestra inconformidad porque esto es una imposición. Si (Peña Nieto) hubiera ganado limpiamente no habría motivo para cercar para que pudiera tomar protesta, es la única forma que les queda para controlar a la gente, así está comenzando y así se va a aventar los seis años
, agregó, indignado también por lo aparatoso del operativo.
Él y Yesenia son vecinos de la colonia Pensador Mexicano, mientras que René vive en la unidad habitacional Emiliano Zapata, contigua al punto donde planeaban originalmente hacer la pinta, a los tres los afectó el cerco que se atenuó por las protestas de los vecinos. Trastornan nuestras vidas
, añadió René, estudiante de la UNAM, quien recuerda que con la toma de protesta de Felipe Calderón fue peor, el cerco duró un mes
.
Hace un año, ellos llevaron un paquete de libros a Peña Nieto, a la sede nacional del PRI: Muertos incómodos, de Paco Ignacio Taibo II; Casi el paraíso, de Luis Spota; un ejemplar de la Constitución, y el Nuevo proyecto de nación: por el renacimiento de México, de Andrés Manuel López Obrador, luego de que el hoy presidente de la República confundió en la FIL de Guadalajara autores y títulos de libros y no consiguió recordar sus lecturas preferidas.