Más de 300 manifestantes se congregaron para rechazar el más reciente acuerdo Japón-EE.UU. sobre la reubicación de la base aérea de Futenma dentro de la isla tal y como informaron los medios locales.
Los descontentos en la ciudad de Nago, sitio de reubicación, además de cuestionar la presencia militar norteamericana en esa prefectura, pidieron al Gobierno de Tokio y Washington anular el plan de reubicación.
A pesar de las protestas, el gobernador de Okinawa, Hirokazu Nakaima, aprobó el año pasado el traslado de la base estadounidense de la zona Ginowan a la ciudad de Nago.
Los habitantes de Okinawa amén de estar preocupados por los peligros que esa base podría cernir sobre la isla, están indignados por los delitos sexuales que perpetraron los infantes de marina estadounidenses allí, muchos de ellos hasta el momento no han enfrentado a la justicia.
Según los informes, el 75 por ciento de las bases de Estados Unidos en el país del sol naciente se encuentra en la isla de Okinawa y alrededor de la mitad del total de 50 mil militares estadounidenses en Japón están estacionados en esa provincia.
