Trabajadores de la empresa avícola Cresta Roja fueron violentamente reprimidos por la gendarmería con balas de goma, carros hidrantes y golpes, para desalojar la Autopista Riccheri en donde los manifestantes esperaban una respuesta por la conservación de 5 mil puestos de trabajo, continuidad laboral y pago de los salarios caídos tras la movilización en la Plaza de Mayo.
Tras el desalojo, el delgado de Cresta Roja, Cristian Villalba, contó por radio que el conflicto con la empresa “cumple un año. La empresa pagaba en cuotas y hoy no tenemos los salarios de la quincena, la quincena pasada y el aguinaldo”.
Los trabajadores únicamente ocuparon un carril de la autopista, y fuentes aseguran que la gendarmería era la que cortaba casi por completo el tránsito de la vía.
Este fue el primer ataque de las autoridades argentinas contra trabajadores, organizaciones de izquierda y referentes de derechos humanos, en el gobierno del presidente Mauricio Macri.
Con información de La Izquierda Diario