Alrededor de 22 mil migrantes hondureños y salvadoreños fueron deportados a sus países por Estados Unidos desde que inició el año fiscal, hace siete meses, según Jeh Johnson, secretario de Seguridad Nacional del país.
Unos 12 vuelos con personas con órdenes de deportación se envían cada semana con destino a Honduras y El Salvador por las autoridades migratorias, agregó.
“Mi mensaje en ambos países fue que nuestras fronteras no están abiertos a la migración irregular o ilegal”, dijo Johnson en su visita a estos dos países.
“Debemos hacer cumplir las leyes de inmigración de Estados Unidos consistentes con nuestras prioridades de control, y vamos a seguir haciéndolo”, señaló Johnson, quien concluyó que el país continuará poniendo de relieve los “peligros” que representan para la nación la llegada de migrantes centroamericanos.
Con información de agencias