Skouries, Grecia. La oposición a un gran proyecto minero canadiense, que destruiría un ecosistema boscoso en el norte de Grecia, fue el detonante de un ataque policiaco a un grupo de manifestantes del movimiento No Gold Mining.

La policía intentó impedir la marcha del 20 de octubre en contra de la destrucción del bosque en Skouries, en la península Calcídica, una región en el norte de Grecia. Hubo 16 personas detenidas, una diputada de Syriza fue agredida por un policía, y otra mujer echada de un coche por policías que le fracturaron la rodilla.

Uno de los detenidos fue llevado al hospital por problemas cardíacos debido a los gases que los granaderos lanzaron dentro de su coche. Sin embargo, a él lo acusan de intento de homicidio.

Una superficie de 26 mil 400 hectáreas fue concesionada a la empresa Hellenic Gold, de las que 410 son terrenos forestales. La sociedad minera planea derribar casi todos los arboles del bosque para extraer el oro, y afirma que volverá a plantarlos cuando termine sus trabajos; sin embargo, la destrucción del bosque local traerá daños irreversibles al ecosistema.

La manifestación fue organizada por el movimiento No Gold Mining, que desde hace años lucha en la península Calcídica contra el proyecto de Hellas Gold, empresa júnior de la canadiense El Dorado Gold. Comprar las montañas, despojar de las tierras a la población, devastar los bosques, contaminar las aguas y construir una gran mina de oro es el objetivo que El Dorado Gold (¡un nombre, un programa!) quiere realizar, frente a las débiles resistencias de la legislación local y nacional.

La estrategia política es decir: “¡La mina de oro va a traer trabajo!”, pero este eslogan no ha logrado su efecto. No se ha logrado ningún consenso entre la gente en lo referente a este proyecto que, literalmente, te mata de trabajo.

Para enfrentar la resistencia de la población, que nunca ha creído las promesas de la empresa canadiense y siempre le ha contestado con un rotundo ¡No!, comenzó la lucha tanto legal como militar. La estrategia de la empresa es que se le concesionen (o que secuestre) varias hectáreas de territorio para realizar exploraciones técnico-cientìficas, militarizarlas con agentes de seguridad privada y lentamente robar partes de montaña. El movimiento No Gold Minig ha denunciado desde el principio la estrategia de la empresa y de los diferentes especuladores, mediante manifestaciones, asambleas y encuentros de contrainformacion que, con el tiempo, han convertido al movimiento en una valiente resistencia popular que continúa gracias también a la solidaridad de parte de la sociedad griega.

Publicado el 5 de noviembre de 2012