La policía marítima helena detuvo y acusó a voluntarios rescatistas de refugiados en la isla de Lesbos, en el mar Egeo.
Frontex, las fuerzas de seguridad europeas, inició la criminalización del trabajo de los voluntarios que colaboran en el rescate de refugiados en el mar, cuyas embarcaciones naufragan por el número de personas que las abordan y el mal tiempo.
Un ejemplo se remonta al pasado 14 de enero, cuando 5 rescatistas que volvían en embarcaciones de plástico con grupos de refugiados fueron interceptados por los guardacostas helenos, quienes a pesar de que comprobaron que no había riesgos para las personas, decidieron arrestarlos.
Además, el bloque europeo aprobó la construcción de nuevas vallas eléctricas y muros para impedir el flujo de refugiados y migrantes, principalmente provenientes de Siria, Afganistán e Irak, que buscan llegar al centro del continente.
Con información de agencias