Miles de familias conmemoraron con flores y velas a las víctimas que dejó el sismo y el tsunami que azotó a Japón el 11 de marzo del 2011, y que dejó alrededor de 18 mil 500 muertos o desparecidos además de causar un accidente nuclear con efectos aún presentes.
Sin importar la lluvia y el frío, las familias rindieron homenaje en distintos puntos del noreste del país, donde se produjo el desastre.
A las 14 horas, tiempo en que sucedió el sismo de 9 grados de magnitud, se observó un minuto de silencio en todo el país, y en la región de Sendai, donde se produjeron más muertos, los supervivientes se congregaron ante una estatua en la playa de Arama, donde las olas enormes arrastraron todo a su paso hace cinco años.
Alrededor de 60 mil personas viven todavía en refugios tras el tsunami que azotó a Japón el 11 marzo del 2011, que es calificado por los expertos como el más fuerte en la historia de Japón, pues con sus seis minutos de duración logró destruir a comunidades y pueblos enteros, dejando a miles de personas sin vivienda.
Además, el desastre natural provocó una de las mayores crisis nucleares en el país por los daños que sufrió la central de Fukushima.
Con información de agencias