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México, 3 de noviembre de 2014. En un operativo con tintes de provocación, granaderos del Estado de México detuvieron a ocho comuneros de Xochicuautla que se oponen al paso de la autopista Toluca-Naucalpan por su territorio, denuncia José Luis Fernández, integrante del Frente de Pueblos Indígenas en Defensa de la Madre Tierra. Los ñhätó se encuentran muy enojados y los granaderos se mantienen en sus tierras, por lo que no sabemos si se podrá controlar la situación, advierte.
Los detenidos (Armando García Salazar, delegado por usos y costumbres, Venancio Hernández, Domingo Hernández, Rosa Saavedra, Felipa Gutiérrez Petra, Mauricio Reyes Flores, Francisca Reyes Flores y Jerónimo Martínez) se encuentran en instalaciones de la Procuraduría General de Justicia del Estado de México (PGJEM), sin que hasta el momento se conozcan los delitos que se les imputan. Se reporta que a las afueras de la Procuraduría hay una gran cantidad de granaderos y policías ministeriales, lo que los comuneros interpretan como una trampa para aprehender a quienes se acerquen a preguntar por la situación de los aprehendidos.
Por la mañana, alrededor de 600 granaderos subieron al bosque Otomí-Mexica resguardando a personal y maquinaria de la empresa Autovan para que realice tala de árboles y trazo del proyecto carretero, situación que ya se había dado también el 17 de octubre de 2014. Los pobladores, acompañados de medios de comunicación, acudieron a intentar establecer un diálogo y solicitar los documentos que avalaran la entrada de los trabajadores a tierras comunales. Al recibir una negativa, realizaron un cordón humano para impedir que entraran las máquinas, y los granaderos detuvieron a tres personas.
Al retirarse los medios de comunicación, los policías aprehendieron a cinco personas más. Ya nos estábamos retirando y jalaron a los demás y al doctor Armando. Yo pienso que era el indicado -al que- que querían agarrar, declaró un testigo a MásDe131. No hubo ninguna provocación por parte de nuestros compañeros; los granaderos estaba buscando cómo detener gente, sostiene José Luis Fernández. En entrevista anterior con Desinformémonos, el comunero aseguró que las incursiones de la empresa y la fuerza pública buscaban generar un enfrentamiento con los pobladores para así poder justificar aprehensiones. Armando García Salazar, el delegado ppor usos y costumbre, es quien ha representado a los opositores a la autopista ante organizaciones sociales e indígenas.
El 2 de mayo, los comuneros opositores a la autopista ganaron un amparo, lo que invalidó las asambleas que permitían el paso del proyecto carretero. El 27 de octubre, los indígenas interpusieron una demanda contra las empresa Autovan y la Secretaría de Seguridad Pública por desacato al amparo y daño ambiental, después de que los granaderos protegieran a los trabajadores de la empresa mientras éstos talaban árboles dentro del bosque, que es área natural protegida.
La fuerza pública y la constructora están en la total ilegalidad y están realizando allanamiento de morada, además de la tala de árboles y ahora la detención arbitraria de los compañeros, insiste José Luis Fernández. Por la tarde, los pobladores de Xochicuautla realizarán una asamblea para determinar sus pasos a seguir. En el poblado se están concentrando habitantes del lugar y colectivos que acompañan la resistencia de los ñäthó a la carretera.
