El pasado 7 de enero, se estrenó el documental independiente “Una Laguna Negra”, un filme que retrata las problemáticas sociales y ecológicas que provocó una granja porcícola en el municipio de Kinchil, ubicado en el estado de Yucatán.
El filme muestra a los pobladores de Kinchil que narran los dos años que el agua de la localidad ha sido contaminada frecuentemente por la granja de cerdos perteneciente a la empresa Kekén, el cual “vierte excremento y agroquímicos en el suelo”, aseguran.
Dicha empresa, es la mayor exportadora mexicana de carne de cerdo y abastece los mercados internacionales de China, Japón, Canadá y los Estados Unidos. Para lograrlo, depreda sin pausa el agua y los recursos naturales de toda la región, recoge el documental.
De igual forma, mujeres y hombres mayas narran la llegada de Kekén en Kinchil con promesas de empleos dignos y estables, integración con los habitantes locales y producción sustentable, acciones que, una década después, no se cumplieron. Precarización laboral, enfrentamientos por la tenencia de la tierra y contaminación casi irreparable de los ecosistemas de la zona, son el resultado.
El guion del documental estuvo a cargo del periodista argentino Patricio Eleisegui, en la realización participa Alberto Rodríguez como referente de la comunidad de Kinchil, además de la joven que vive en Mérida, Maricarmen Sordo, en la dirección.
Tomado de La Coperacha