Foto: Moisés Quintana / Desinformemonos
Ciudad de México | Desinformémonos. Este 8 de junio, pueblos, comunidades, colectivos, escuelas y activistas de México y todo el mundo protagonizaron una jornada global para pronunciarse contra la guerra hacia las comunidades del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), y exigir el desmantelamiento de los grupos armados, justicia para las víctimas y libertad para los pueblos.
Con movilizaciones, actos culturales y políticos, volanteos, encuentros y pintas, cada pueblo y colectivo protestó para señalar la responsabilidad del Estado mexicano y exigir el cese de la violencia contra las comunidades autónomas en Chiapas, en respuesta al llamado internacional que miles de académicos, artistas y activistas como Noam Chomsky realizaron tras el ataque armado que la Organización Regional de Cafeticultores de Ocosingo (Orcao) perpetró contra la comunidad de Moisés Gandhi, el pasado 22 de mayo.
Desde países como Grecia, Francia, Alemania, España, Suiza, Argentina y Estados Unidos, y en los estados de Guanajuato, Michoacán, Morelos, Chiapas, Baja California, Baja California Sur, Veracruz y la Ciudad de México, consignas como «Ya basta», «Alto a la guerra contra las comunidades zapatistas» y «Viva el EZLN» inundaron las calles en forma de pancartas, coros y volantes.
En la Ciudad de México, integrantes de la comunidad otomí residente en la Ciudad de México, normalistas, estudiantes, maestros y colectivos avanzaron por las calles del Centro Histórico hasta llegar al Zócalo con música, consignas, pintas, carteles y mantas en solidaridad con las comunidades zapatistas y en exigencia del cese inmediato de los ataques armados.
Las movilizaciones y protestas se registraron a lo largo de todo el país. Por ejemplo, en San Cristóbal de las Casas, Chiapas, los activistas colocaron cartulinas en la plaza catedral para exigir que se garantice la salud del tseltal Jorge López Sántiz, quien resultó herido de gravedad por el ataque paramilitar de la Orcao. A su vez, en Guanajuato, Morelia, Jalapa, Tijuana, entre otras ciudades, se realizaron pintas con estencil, actos culturales, volanteos y mesas de información sobre la situación de alarma en la que se encuentra Chiapas.
El pasado 31 de mayo, miles de cineastas, escritores, académicos, artistas, defensores comunitarios y activistas nacionales e internacionales como Noam Chomsky, Bertha Navarro, Daniel Giménez Cacho, Fernanda Navarro, Juan Villoro, María de Jesús Patricio (Marichuy), entre otros, responsabilizaron al Estado de la agresión armada contra la comunidad de Moisés Gandhi.
«El ataque de la ORCAO no es un conflicto entre comunidades, como lo caracterizaría Carlos Salinas y como seguramente pretenderá hacerlo López Obrador. El ataque es responsabilidad directa del gobierno de Chiapas y del gobierno federal. El primero por solapar el crecimiento de grupos criminales que han hecho que Chiapas pasara de una relativa tranquilidad a ser un foco rojo de violencia. El segundo por guardar silencio y pasividad ante la evidente situación del sureste», señalaron en el texto.
Los intelectuales y activistas explicaron que el ataque paramilitar contra las comunidades autónomas es el resultado de las políticas sociales del gobierno de Andrés Manuel López Obrador «por dividir y corromper destruyendo el tejido social de las comunidades y pueblos», particularmente en Chiapas.
«Chiapas está al filo de la guerra civil con paramilitares y sicarios de los diversos cárteles que se disputan la plaza y grupos de autodefensas, con la complicidad activa o pasiva de los gobiernos de Rutilio Escandón Cadenas y Andrés Manuel López Obrador», agregaron.
Para ello, convocaron a mantener la jornada de movilizaciones y actos para pronunciarse contra la guerra a las comunidades del EZLN, que comenzó el pasado 27 de mayo y que concluirá el próximo 10 de junio, en la que se incluyó la acción coordinada global de este 8 de junio.
