La Red de Alerta Temprana dirigió, este 27 de enero, una acción urgente a diversas autoridades del país para solicitar atención médica urgente para Jonathan Alejandro Cabañas Ortega, víctima de detención arbitraria y sobreviviente de tortura, actualmente preso en el Centro Preventivo y de Readaptación Social Juan Fernández Albarrán, de Tlalnepantla, Estado de México.
Jonathan Cabañas fue detenido el 29 de mayo de 2015 por policías municipales y estatales. Los uniformados pretendían realizarle una revisión con el pretexto de que portaba un cerveza de lata, la cual se encontraba cerrada. Al oponer resistencia, Jonathan fue golpeado por elementos de la policía estatal y municipal en presencia de sus familiares, quienes también fueron blanco de la agresión.
Jonathan habría sido torturado con golpes y descargas eléctricas en la cabeza y los testículos, mismos que lo dejaron inconsciente. La tortura se prolongaría durante su traslado al Ministerio Público, con una parada en un lugar solitario, al parecer una barranca . “Aguántese cabrón no que muy machito”, sería la respuesta de los uniformados a las suplicas de Jonathan, quien insistía en que cesara la violencia en su contra.
Una vez presentado ante el Ministerio Público, Jonathan habría sido acusado falsamente de portar un arma de fuego y de robar 800 pesos y un celular de una tienda de autoservicio. Así, fue indiciado por el delito de robo con violencia.
Hoy, Jonathan lidia con las secuelas físicas y psicológicas que le dejó la tortura. Sus familiares refieren que el hombre tiene fuertes y frecuentes dolores de cabeza, además de “delirio de persecución”, situación se ha agravado como consecuencia de un fuerte golpe que recibió en la cabeza a mediados de diciembre pasado.
Pese a que su estado de salud se deteriora día con día, Jonathan no ha recibido un seguimiento continuo del tratamiento médico al que está siendo sometido y que, de acuerdo con sus familiares, se trata de fármacos prescritos para pacientes con esquizofrenia.
Frente a este panorama, las organizaciones civiles que conforman la Red de Alerta Temprana manifiestan su preocupación e instan a las autoridades penitenciarias y de gobierno a satisfacer las siguientes peticiones: el pronto traslado de Jonathan a un centro hospitalario especializado para su correcta valoración y diagnóstico; autorizar la visita del médico Adrián Ramírez y de la sicóloga María Isabel Mazo, con fines de valoración; en caso de que amerite, facilitar el internamiento de Jonathan en un centro hospitalario; cumplir con la responsabilidad internacional de prevenir y sancionar la tortura; realizar una investigación pronta e imparcial sobre la tortura denunciada y por la falsedad en las declaraciones; que los responsables de los hechos sean enjuiciados y castigados por un tribunal imparcial e independiente, con penas adecuadas; que se adopten las medidas necesarias para garantizar que Jonathan, sus familiares y defensores estén protegidos contra malos tratos o intimidación; garantizar a Jonathan la reparación y el derecho a una indemnización justa y adecuada; evitar los retardos en la administración de justicia; y garantizar el respeto de los derechos humanos y las libertades fundamentales en todo el país.