«Vaquita», como le pusieron los vecinos de Antofagasta, se ha transformado en el perro ícono de las luchas en la zona. Siempre que hay una marcha él está ahí. Como se ha visto en varios puntos de Chile, los canes han sido protagonistas, como el legendario «Matapacos».
Pero la salud de Vaquita no andaba del todo bien, ya que en una de las manifestaciones fue herido con perdigones.
Los vecinos intentaron agarrarlo para curarlo, sin embargo el perro no se dejaba tocar. Fue así que comenzaron a convocar a una marcha con el fin de engañar al perro y llevarlo hasta la clínica veterinaria.
Finalmente Vaquita ingreso a la clinica y fue directo a cirugía y se encuentra en recuperación.
Publicado originalmente en ANRed