En dos boletínes, tanto la Sección 22 como el Espació Civil se pronunciaron en contra de la militarización del Istmo. La Sección 22 “rechaza la militarización que intentan operar en la región del Istmo de Tehuantepec como maniobra política y económica de los personeros del poder para imponer las zonas económicas especiales”. Por su parte, las organizaciones de la sociedad civil informan que “hemos sido testigas de la falta de capacidad y grave voluntad política del gobierno para atender las grandes necesidades de la gente que enfrenta los estragos que dejaron las lluvias y el sismo; frente a estas dramáticas circunstancias, se han multiplicado los esfuerzos de solidaridad ciudadana para suplir la ineficiencia gubernamental”. Además, el Espacio Civil critica que “es grave es incongruente que el titular de la defensoría “solicita al Gobierno del estado que de manera temporal solicite la colaboración del Ejército Mexicano para que mantenga una constante vigilancia” y con cumplan labores de seguridad pública”. Sentencia que “la postura expresada por la DDHPO es muestra de su servicio y complicidad con el Estado, es aberrante que el organismo autónomo cuya misión es velar por el respeto de los derechos humanos, sean quien aliente a la militarización”, y exigen que el Congreso del Estado tome con seriedad dicha actuación e inicie procedimiento de destitución del titular por contravenir con esta acción el mandato de la Defensoría.

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