Luego de pasar 36 horas en la Ciudad de México, las autoridades tradicionales del pueblo Yaqui volvieron a Sonora este domingo, 10 de agosto, tras reunirse con Juan José Guerra Abud, titular de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales del gobierno federal, ante quien plantearon la ruta crítica que permita destrabar el conflicto por la construcción del Acueducto Independencia, proyecto que debió ser suspendido desde el año pasado, por orden de la Suprema Corte de Justicia, ya que dicha obra se emprendió sin contar con la aprobación de esta comunidad indígena.
Como se recordará, en diciembre de 2013, la Suprema Corte de Justicia determinó que las autoridades de Sonora violaron el derecho de los indígenas Yaquis a manifestar su parecer en torno al proyecto del Acueducto Independencia, con el cual se pretende desviar agua del río Yaqui hacia la ciudad de Hermosillo, la capital estatal, esto, a pesar de que por decreto presidencial emitido en 1940, esta comunidad indígena posee los derechos de aprovechamiento de 50% del caudal de dicho río.
En su sentencia, la Suprema Corte ordenó a las autoridades de Sonora suspender todos los trabajos relacionados con el Acueducto Independencia, hasta que la consulta al pueblo Yaqui fuese concretada, proceso que sigue pendiente, aclaró el vocero indígena, Mario Luna, debido a que no están dadas las condiciones de buena fe y equidad en el proceso, las cuales fueron ordenadas por la misma Suprema Corte.
Para que el proceso de consulta se realice de buena fe añadió Luna, las autoridades de Sonora deben cesar esta campaña de odio racial que mantienen contra el pueblo Yaqui, en el que nos señalan como los culpables de que Hermosillo padezca insuficiencia de agua, pero atender este asunto no sólo es responsabilidad de las autoridades estatales, sino principalmente de la Secretaría de Gobernación (del Ejecutivo federal), ya que este organismo es el encargado de vigilar en correcto proceder de las radiodifusoras y de las televisoras que transmiten estos mensajes de odio racial.
En segunda instancia, señaló el vocero yaqui, la ruta crítica establecida por esta comunidad indígena para que acepten la realización de la consulta es que ésta se desarrolle en un ambiente de equidad e igualdad, porque no puedes estar en un proceso de diálogo, si tu interlocutor sostiene una pistola contra tu cabeza, y eso es lo que están haciendo con nosotros: por un lado entablan mesas de diálogo con nosotros, y por otro lado le fabrican delitos a las autoridades tradicionales yaquis y emiten órdenes de aprehensión en nuestra contra.
En resumen, destacó Luna: No estamos en realidad pidiendo nada extraordinario, sino únicamente que se cumpla la sentencia de la Suprema Corte: el Acueducto Independencia no debe operar mientras no se realice el proceso de consulta, y la consulta no debe realizarse si no se garantiza la buena fe de las autoridades y la equidad para que los yaquis emitan su parecer, y nada de esto se ha cumplido, ni siquiera han dejado de extraer agua del río Yaqui a través del acueducto no han respetado a la Corte.
Como parte de este proceso de acercamiento con las autoridades federales, concluyó el vocero del pueblo Yaqui, el titular de la Semarnat se comprometió a acudir a Sonora y visitar sus comunidades en dos semanas, a más tardar.