Noam Chomsky es uno de los académicos más citados de la historia, tanto por su labor como lingüista como por su trabajo como politólogo. En las últimas décadas su notoriedad fundamentalmente se ha debido a sus críticas al gobierno de Estados Unidos y a su prominencia como figura de la izquierda mundial (aunque las categorías izquierda/derecha se empiezan a desdibujar).
Chomsky ha sido uno de los más feroces críticos del fascismo y de la política ultraliberal estadounidense, que en algunos rasgos coincide con las prácticas del fascismo o con formas más sofisticadas del autoritarismo y el imperialismo. A sus 93 años, Chomsky sigue lúcido, y su cultura y experiencia política lo hacen siempre una voz que merece escucharse.
En una entrevista reciente con la revista New Statesman, Chomsky habló sobre la invasión rusa a Ucrania. Antes que nada condenó la situación, la cual «es monstruosa para Ucrania», y no vaciló en decir que se trata de una «agresión criminal» por parte de Putin. Pero no se quedó allí, como la gran mayoría de los medios occidentales. Un pensador profundo tiene que preguntarse por las causas.
Chomsky explica:
Hay dos formas de verlo (:) la que es predicada en Occidente, es sondear las profundidades de la mente torcida de Putin y tratar de determinar qué está sucediendo en su psique. La otra es simplemente ver los hechos: por ejemplo, en septiembre de 2021 Estados Unidos lanzó una fuerte declaración política, llamando a un incremento de cooperación militar con Ucrania, aumentando su suministro de armas militares avanzadas, todo como parte del programa para acercar a Ucrania a la OTAN.
Sobre la idea de que realmente lo que motiva a Putin no es el acercamiento de la OTAN sino la expansión de la democracia liberal, Chomsky señala:
Putin está tan preocupado por la democracia como nosotros. Si se rompe la burbuja de propaganda por unos segundos, Estados Unidos tiene un largo récord de subvertir y destruir la democracia. ¿Tengo que recordarlo? Irán en 1953, Guatemala en 1954, Chile en 1973, etc… Pero se supone que debemos honrar y admirar el enorme compromiso de Washington con la soberanía y la democracia.
Chomsky rememora que los países de la OTAN negociaron con Rusia que no se expandirían más allá de Alemania cuando se produjo la caída del Muro de Berlín.
El entrevistador de New Statesman comenta que Chomsky antes había señalado que «si las leyes de Núremberg fueran aplicadas, todos los presidentes desde la posguerra en Estados Unidos habrían sido colgados». Es decir, bajo la misma lógica de los Juicios de Núremberg, los presidentes de Estados Unidos habrían sido condenados a muerte. Por supuesto, eso es impensable actualmente, lo cual habla de la posición de privilegio de la potencia mundial, que no puede obviarse como una de las causas de esta y otras guerras.
Bajo esta lógica, Putin también debería ser condenado. Los canales para llevarlo a un tribunal por crímenes de guerra no son sencillos de implementar, pero Joe Biden ha sido enérgico a este respecto.
Chomsky dice que está bien manifestar indignación moral ante las acciones de Putin, pero insiste en que sería un mayor progreso señalar las atrocidades que han sido cometidas por Estados Unidos:
en Afganistán, literalmente millones de personas están enfrentando una hambruna inminente. ¿Por qué? Hay comida en los mercados, pero las personas tienen tan poco dinero que tienen que ver cómo sus hijos se mueren de hambre porque no pueden ir al mercado a comprar comida. ¿Por qué? Porque Estados Unidos, con el apoyo de Gran Bretaña, ha retenido los fondos de Afganistán en los bancos de Nueva York y no los libera.
Asimismo, las sanciones económicas impuestas en Irak causaron en su momento la muerte de millones de personas.
En la misma entrevista Chomsky afirma que estamos en un momento muy oscuro en el que es posible que se produzca «la destrucción organizada de la vida humana en la Tierra». Le preocupa que el ala dura del Partido Republicano que apoya a Trump no parece darle mucha importancia al cambio climático, y entiende que en las siguientes elecciones tienen muchas oportunidades de retomar el poder.
Publicado originalmente en Pijama Surf