Tras casi 50 años de no salir a las calles en un movimiento nacional, ayer miles de médicos se manifestaron en el Distrito federal y 25 estados. En el Centro Histórico lograron rebasar dos veces el cerco policial que les impedía llegar el Zócalo, y a las puertas de Palacio Nacional pidieron el cese a la criminalización de su actividad y la cancelación de las órdenes de aprehensión contra 16 de sus colegas de Jalisco; señalaron que la Secretaría de Salud (Ssa) los somete a más fiscalización y que, amenazados, son obligados a trabajar.
Fue una marcha a la que los médicos acudieron con batas blancas y un listón negro de luto; los asistentes pertenecen a instituciones públicas y privadas. Fueron convocados básicamente a través de las redes sociales, luego de que el pasado 4 de junio, 16 galenos del Centro Médico de Occidente del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) fueron consignados por una presunta negligenciade 2010, y un juez determinó que cometieron homicidio culposo.
Sin recursos no hay salud
En el trayecto del Ángel de la Independencia al Zócalo, desde las 9 horas, corearon consignas como No son 16, #Yosoy 17, ¡No somos dioses ni somos criminales! y ¡Sin recursos no hay salud! El trayecto lo hicieron en calma hasta que se enfrentaron al bloqueo de los granaderos para llegar al Zócalo, ya que los organizadores acordaron con las autoridades del Distrito Federal que el mitin lo harían en la Alameda, pero de esto no informaron a los asistentes.
Por eso, cuando la vanguardia de la marcha se desvió hacia el parque, los manifestantes pidieron: Zócalo, Zócalo. En la calle Tacuba dieron vuelta, pero frente al Palacio de Correos una valla de granaderos les impidió el paso. Los médicos retrocedieron y al unísono advirtieron a los uniformados: ¡Nos veremos en urgencias!
Al mismo tiempo, otras centenas de doctores caminaban por la calle 5 de Mayo, y unas cuadras antes de llegar al Zócalo los granaderos les cerraron el camino. Hubo un leve forcejeo y tras una negociación con la Secretaría de Seguridad Pública llegaron a las puertas de Palacio Nacional, mientras la plancha central era protegida por elementos policiacos. De allí salió con una herida de seis centímetros en la cabeza, Miguel Ángel Vázquez, de la clínica 53 del IMSS.
Luego de casi 50 años, los médicos volvieron a manifestarse a nivel nacional ante el llamado del movimiento #YoSoy17Foto Cristina Rodríguez
Los médicos cuestionaron que el Gobierno del Distrito Federal ha convertido al Zócalo en un salón de fiestas, y ya no se le da espacio a la protesta social. Actualmente en la plancha central están instaladas grandes pantallas por las que se transmiten partidos del Mundial de Futbol y hay tres canchas.
Durante el mitin, donde hubo cuatro oradores, Rafael Cervantes López, del Colegio Médico de México y con 50 años de ejercer la medicina, detalló que varias veces se ha buscado fiscalizar la actividad médica. Señaló que la secretaria de Salud, Mercedes Juan, los amenaza con crear una fiscalía para la vigilancia de la calidad de la atención a los pacientes.
Nosotros le pedimos que también vea la carencia en insumos, el desabasto, la falta de mantenimiento y conservación de las unidades; que valore las condiciones de trabajo que obligaron a nuestros compañeros de Jalisco a caer en esta situación. También le pediríamos que transparente y rindan cuentas los funcionarios del manejo del poder y los fondos, indicó.
Señaló que existe una acción punitiva y sometimiento de la clase médica para obligarnos a trabajar amenazados y en silencio, en un sistema de salud que está rebasado. Agregó que el juicio sumario aplicado a los 16 médicos de Guadalajara no es sino un síntoma más de este sistema que está enfermo. Que esta manifestación sea un aviso para las autoridades sanitarias en el sentido de que estamos unidos y sabremos defender nuestros derechos.
A su vez, Alfredo Rustrián recordó que hace 50 años un grupo de médicos del Hospital 20 de Noviembre inició un movimiento histórico. Felicitó a los asistentes porque han salido a las calles a dignificar al médico, quien tiene vocación de servir.