Diversos grupos de migrantes y refugiados se enfrentaron ayer en límite entre Grecia y Macedonia, donde hay más de 5 mil indocumentados en campamentos improvisados por la decisión del gobierno macedonio de cerrar su frontera y permitir la entrada únicamente a personas provenientes de Siria, Afganistán e Iraq.
Los migrantes se opusieron a los grupos autorizados de entrar al territorio macedonio, lo que generó el conflicto entre ambos bandos que se lanzaron piedras durante el enfrentamiento.
El panorama de Macedonia se intensificó después de que el pasado miércoles se prohibió la entrada a alrededor de 500 personas provenientes de Bangladesh, Marruecos y Pakistán, que intentaban cruzar por fragmento de tierra que no tenía vallas.
Ante esto, la policía atacó con gases lacrimógenos y decidió cerrar la entrada a sirios, afganos e iraquís, contradiciendo la decisión de permitirles el paso.
El sábado pasado el gobierno de Macedonia, país clave en la ruta balcánica utilizada por los migrantes y refugiados para llegar al centro de Europa, inició el levantamiento de una valla metálica de tres kilómetros para “controlar” el flujo de personas que entran por sus fronteras.
Con información de agencias