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México es el país que más usa el programa de espionaje Pegasus, revela investigación

Redacción Desinformémonos

Ciudad de México | Desinformémonos. México es el mayor usuario del programa de espionaje Pegasus, y entre sus objetos de vigilancia digital se encuentran periodistas y organizaciones de derechos humanos como el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro-Juárez (Centro Prodh), reveló una investigación del diario estadounidense New York Times.

De acuerdo con el reportaje, el ejército mexicano «no sólo es el cliente más antiguo de Pegasus, sino que también ha atacado más teléfonos móviles con ese programa malicioso que cualquier otra agencia gubernamental del mundo».

«Ningún lugar ha tenido más experiencia con las capacidades y los peligros de esta tecnología que México, el país que inauguró su difusión por todo el mundo», señala la investigación publicada este martes, en la que se declara que «México sigue utilizando Pegasus para espiar a personas que defienden los derechos humanos, incluso en meses recientes».

La investigación apunta entre los casos más recientes se encuentran dos defensores del Centro Prodh, organización que acompaña a víctimas de violaciones a los derechos humanos, quienes a finales de 2022 recibieron correos electrónicos en los que la empresa Apple les notificaba que sus teléfonos habían sido vulnerados por «atacantes patrocinados por un Estado».

La organización explicó que sus integrantes han sido atacados con Pegasus en al menos cinco ocasiones, mientras defendía «algunas de las causas de derechos humanos más emblemáticas del sexenio anterior» como Tlataya, la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa y la masacre de Atenco.

«La confirmación sobre la reiteración del espionaje contra el Centro Prodh en este sexenio causa indignación y preocupación. Se trata de dos ataques en dos sexenios diferentes contra la misma organización, por defender derechos humanos, lo que entendemos es un caso único a nivel mundial», señaló el Centro Prodh en un comunicado.

Los integrantes del Centro exigieron que cese el espionaje, que se investiguen los casos nuevos, así como el cúmulo de denuncias no procesadas; y que existan controles civiles para las fuerzas armadas «que hoy ponen en riesgo los derechos humanos y la vida democrática del país».

El programa Pegasus, de la corporación israelí NSO Group, actúa sobre dispositivos que, una vez infectados con el malware, son controlados por operadores que tienen control de cámaras, acceso a videos y fotografías, agendas, contactos, aplicaciones de mensajería y otras aplicaciones, en tiempo real y sin límites.

A continuación el comunicado del Centro Prodh:

El Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro-Juárez A.C. (Centro Prodh) ha recibido la confirmación de que dos personas de su equipo fueron espiadas con el software Pegasus durante el pasado año 2022.

A fines de 2022, dos personas de nuestro equipo, recibieron correos electrónicos en los que la empresa Apple les notificó que sus teléfonos habían sido vulnerados por “atacantes patrocinados por un Estado”. Los correos electrónicos advertían que los ataques habían ocurrido “por quienes son” o “por lo que hacen” y alertaban sobre que el nuevo ataque podía haber dejado vulnerables sus comunicaciones, archivos, cámaras, imágenes y el resto del equipo.

Con la ayuda de la R3D: Red en Defensa de los Derechos Digitales, Social TIC y Artículo 19, los teléfonos de nuestros colegas fueron analizados y Citizen Lab, instancia de la Escuela Munk de Asuntos Globales y Política Pública de la Universidad de Toronto, confirmó recientemente que integrantes del Centro Prodh habían sido atacados con Pegasus, en al menos cinco ocasiones.

Cabe recordar que, en 2017, una investigación llevada a cabo por la R3D: Red en Defensa de los Derechos Digitales, Social TIC y Artículo 19, con el respaldo técnico de Citizen Lab, encontró que tres personas del Centro Prodh habían recibido mensajes infecciosos para vulnerar sus teléfonos, lo que ocurrió al tiempo que el Centro Prodh defendía algunas de las causas de derechos humanos más emblemáticas del anterior sexenio, como los casos Tlatlaya, Ayotzinapa y Atenco. En dicha ocasión, al comprobarse el espionaje, denunciamos ante Fiscalía con la expectativa de que el esclarecimiento y la sanción contribuyeran a la no repetición, lo que no ocurrió ni ha ocurrido.

La confirmación sobre la reiteración del espionaje contra el Centro Prodh en este sexenio, causa indignación y preocupación. Se trata de dos ataques en dos sexenios diferentes contra la misma organización, por defender derechos humanos, lo que entendemos es un caso único a nivel mundial.

Existiendo en México regiones en las que colegas del movimiento de derechos humanos enfrentan riesgos sobre la vida e integridad personal, en el Centro Prodh reconocemos que las amenazas digitales no son los ataques más peligrosos; al mismo tiempo, consideramos que la gravedad de que el espionaje siga ocurriendo no debe minimizarse, pues los reiterados ataques contra defensores y periodistas evidencian a un Ejército que al actuar sin controles y empoderase como nunca antes se ha vuelto ya una amenaza a la democracia y a una Fiscalía que es incapaz de investigar delitos complejos para revertir la impunidad y con ello favorece la repetición de las violaciones de derechos humanos.

En el Centro Prodh continuaremos haciendo nuestro trabajo. Con seriedad y poniendo en el centro a las víctimas, como lo hemos hecho siempre. Desde luego, denunciaremos estos nuevos ataques ante las autoridades correspondientes. También los estamos denunciando públicamente, sabedores de la importancia de hacer pedagogía pública sobre el tema.

En este sentido, nos sumamos a las exigencias que han venido formulando la R3D: Red en Defensa de los Derechos Digitales, Social TIC y Artículo 19, al documentar y denunciar espionaje en contra de defensores de derechos humanos y periodistas, a quienes hacemos patente nuestra solidaridad.

Exigimos que cese el espionaje; que se investiguen estos casos nuevos, así como el cúmulo de denuncias no procesadas; también urgimos que existan controles civiles para las Fuerzas Armadas que hoy ponen en riesgo los derechos humanos y la vida democrática del país.

Lee el reportaje del NYT en https://www.nytimes.com/es/2023/04/18/espanol/pegasus-mexico-gobierno-ejercito.html

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