Memoria viva
“Desaparecido, dicho de una persona que se halla en paradero desconocido, sin que se sepa si vive” (RAE. Diccionario de la lengua española).
“Sin que se sepa si vive”. Esta es la duda que aflige a miles de familias latinoamericanas desde los años 70. Desaparecidos mientras iban a la escuela o al trabajo, mientras caminaban por las calles de la ciudad, mientras se manifestaban; como ha pasado recientemente en Argentina, con Santiago Maldonado. Cargado en una camioneta blanca y desde entonces desaparecido.
Si en el pasado los gobiernos dictatoriales hacían desaparecer a la gente, ahora son gobiernos colusivos y corruptos. Esto es corroborado por los numerosos familiares, entre ellos los de México, que en marzo de 2016 fueron recibidos por “Libera – Asociaciones, nombres y números contra las mafias-“ durante las iniciativas en preparación del 21 de Marzo, día en el cual se celebra la Memoriay el Compromiso contra las mafias. Cada año, el primer día de la primavera, la comunidad de Libera acompaña a los familiares de las víctimas inocentes de la mafia. Desde hace algunos años, este abrazo llega también a América Latina a través de «ALAS-América Latina Alternativa Social», la red que Libera ha creado con tantas realidades desde México hasta Argentina, porque un hilo de dolor une la Italia con los países latinoamericanos.
En Italia hay muchas personas desaparecidas por manos mafiosas: Lea Garofalo, el pequeño Giuseppe Di Matteo, Pierantonio Sandri y Lollò Cartisano, quienes son sólo algunos de los muchos desaparecidos italianos. Los restos de sus cuerpos fueron encontrados después de mucho tiempo gracias a las declaraciones de los colaboradores de la justicia. La lista sería aún más larga, porque muchos nunca han sido encontrados. Las desapariciones italianas comenzaron en los años 70 con Cosa Nostra (mafia siciliana) para ganar dinero fácil: secuestraban niños de familias y empresarios ricos, exigiendo el rescate, pero a pesar del pago, sucedía que las víctimas a menudo no volvían a casa. El mismo modus operandi fue utilizado por la Ndrangheta (mafia de Calabria); muchos secuestrados fueron asesinados en las montañas de Calabria. Cuando ambas organizaciones criminales comenzaron a ganar bastante dinero con el narcotráfico, los secuestros terminaron.
Las mafias y el narcotráfico son la causa de tragedias personales que han afectado a muchas familias italianas, y también a muchas otras familias latinoamericanas. De este dolor surgió el deseo de buscar la verdad y la justicia para sus seres queridos. Libera, a través de la red de ALAS, da voz a los familiares de desaparecidos y a las víctimas inocentes de las organizaciones criminales, para que su grito de rebelión en contra de la ilegalidad y el silencio atraviese el océano.
Dar voz también significa hacer memoria. La historia de los familiares no es solo una manera de informar a la ciudadanía sobre las injusticias sufridas, sino sobre todo establecer una relación con el oyente, que será el portador de esos testimonios. Hacer memoria significa ayudar a «crear» ciudadanos responsables, sensibles a las historias de otros; significa trabajar para la comunidad.
Esto es aún más importante para los jóvenes y para las generaciones futuras, para que sean portadores de valores y reconozcan los errores del pasado para no repetirlos, para no voltearse del otro lado cuando haya injusticias en su propio país o en otros lugares. Porque hacer memoria significa cambio.
Libera. Asociaciones, nombres y números contra las mafias
Es una red italiana de la sociedad civil que lucha contra los sistemas mafiosos y la corrupcion a travès de la Memoria de las victimas y apoyo a sus familiares, de la promocion de una cultura de paz y legalidad, y del Compromiso para el re-utilizo social de los bienes encautados a los mafiosos. Contaremos de la belleza de experiencias concretas que hay en el proceso de cambio desde abajo, y de como la justicia de todos es libertad para cada uno, en Italia como en todo el mundo.