La ciudad de Masaya, ubicada 30 kilómetros al Este de Managua, vivió uno de sus peores enfrentamientos durante el sábado 2 de junio. Una batalla campal entre los pobladores y policías animotines, en el centro de la ciudad, y que dejó un saldo de cinco muertos y más de cien heridos. Desde el 19 de abril, esta ciudad se ha levantado contra el régimen de Daniel Ortega, como lo hizo en febrero de 1978 contra la dictadura del presidente Somoza. Sus calles, cada esquina, están protegidas por barricadas custodiadas por jóvenes de las comunidades, y que impiden el acceso vehicular y de los grupos armados de la policía y las turbas sandinistas. La ciudad completa está en paro.
Publicado originalmente en El Faro