Los desafíos de Libera: ayer y hoy
Es el 9 de noviembre de 1989, el mundo observa en la televisión las primeras imágenes de uno de los acontecimientos que marcarían la historia: la Caída del muro de Berlín. Y mientras las excavadoras estaban trabajando, una intercepción registraba a un hombre de la mafia que se dirigía a su interlocutor en Alemania: «Ve a Berlín Oriental, ha caído el Muro de Berlín.» » ¿Y qué debo hacer?», dijo luego su interlocutor. Impacientemente, el mafioso respondió: «Tienes que comprar todo, todo, todo, comprar discotecas, bares, pizzerías, todo, todo, todo. «Seis años después, el 25 de marzo de 1995, nacía en Italia una red de asociaciones: Libera – associazioni, nomi e numeri contro le mafie. Nació, después de las matanzas de Capaci y Via D’Amelio, nació con el deseo de hacer algo más, de no rendirse frente a la pena, a la ira, a la resignación. Una red expresión social de un país que trabaja unido, que quiere luchar contra las mafias, las zonas grises de la política, de la corrupción y de la malversación. Había que recordar a todos aquellos que habían perdido sus vidas injustamente y buscar la verdad para todas las familias de víctimas inocentes. Y no dejarlos solos. Había que empezar de nuevo desde nuestras tierras, las tierras incautadas a los mafiosos, gracias a la intuición de la ley Rognoni / La Torre de 1982 y era necesario dar un paso hacia adelante para retomarlas y darles dignidad. Fueron recogidas más de un millón y medio de firmas y el 7 de marzo de 1996 fue aprobada la ley 109 sobre la reutilización de los bienes confiscados a las organizaciones criminales. Con el pasar de los años, Libera crece y multiplica sus actividades. Mafia y corrupción siguen propagándose en el país. No sólo en el sur. Sus raíces y sus acciones se expanden hacia el norte de Italia. Y se apunta hacia Europa.
Libera empieza así un nuevo desafío: crear redes de asociaciones a nivel internacional. Se necesitan nuevos métodos y nuevas herramientas. Surgen los primeros grupos de Libera en el extranjero, pero no es suficiente. Se necesita dar un paso más grande. Crear redes a nivel mundial. Ponerse en contacto con movimientos, asociaciones y organizaciones comprometidas en la construcción de una sociedad que se vea reflejada en los valores de justicia social, solidaridad y paz. Empieza así un camino colectivo abierto a la complejidad del mundo y un conocimiento directo de los efectos sociales de las mafias y de la criminalidad a nivel internacional. En América Latina se promueve una red, formalizada en mayo de 2015 en Ciudad de México, ALAS – América Latina Alternativa Social – 11 países, más de 40 realidades que permiten crear-“tejer” rutas de participación y solidaridad a nivel internacional. Tejiendo Rutas mediante un trabajo sobre: la antimafia social, la corrupción política y económica, los derechos humanos y los crímenes de lesa humanidad, la equidad de género, el periodismo de investigación y la libertad de expresión, la prevención social y la memoria. Las mismas rutas que en la tercera reunión de los movimientos populares, celebrada en Roma del 2 al 5 de noviembre, convocada por el Papa Francisco, se han encontrado en un horizonte de sentido común: una Tierra sin mal, una casa de todos donde el trabajo justo y digno debe estar garantizado. Con el mismo compromiso, pero con diferentes caminos, Libera llega a Europa. El viejo continente está sufriendo un período de crisis, sobre todo social. Los muros y las fronteras limitan las tierras y las mentes. Algo está pasando. Muchas realidades se acercan a Libera: en Alemania Mafia? Nein Danke!; y asociaciones de italianos en el extranjero nacidas con la misma conciencia como por ejemplo Libera France y Amici di Libera en Suiza. Se interceptan los problemas, se construyen los caminos. País por país. Libera llega a constituirse megáfono para un tema: las mafias y el crimen organizado que, en la mayoría de los casos, Europa se delega con demasiada frecuencia a la policía y a las burocracias nacionales. Y se obtienen los primeros resultados. En 2013, junto con otras organizaciones, como consecuencia de una campaña italiana contra la corrupción, Libera promueve al Intergrupo Europarlamentar para la transparencia, la integridad, el crimen organizado y la corrupción. El 3 de abril de 2014 (2014/42/UE) se aprobó una directiva para la reutilización social de los bienes confiscados, también en Europa. Un camino muy difícil a causa de la rica y variada composición del continente, por su historia, sus modelos legales y económicos, y ahora se vuelve necesario monitorear hasta que los países la cumplan. Pero Europa no es sólo la Unión Europea. La dimensión mediterránea tiene su propia centralidad redefiniendo sus confines y pueblos de pertenencia. Todos los días escuchamos hablar de desgracias: los muertos y los desaparecidos en un mar que antes fue para los comerciantes y que hoy se encuentra cada día más en manos de los traficantes. El contraste a las mafias y la corrupción tiene que implicar la promoción y protección de los derechos humanos. Construir una sociedad sostenible ética, política y económicamente significa ser capaz de eliminar el arquitrabe que basa este mundo sobre un capitalismo que actúa de manera mafiosa y una mafia capitalista. Éstas son las razones por la cuales Libera está ahora llegando también a África. Un proceso que ya se inició y que está cerca de los familiares de las víctimas del Mediterráneo en Túnez y en contra de la corrupción en el Líbano. Una red que necesariamente tendrá que extenderse a toda África, a partir del África subsahariana y de las muchas voces de la sociedad civil, con demasiada frecuencia dejadas aisladas y desatendidas.
Libera. Asociaciones, nombres y números contra las mafias
Es una red italiana de la sociedad civil que lucha contra los sistemas mafiosos y la corrupcion a travès de la Memoria de las victimas y apoyo a sus familiares, de la promocion de una cultura de paz y legalidad, y del Compromiso para el re-utilizo social de los bienes encautados a los mafiosos. Contaremos de la belleza de experiencias concretas que hay en el proceso de cambio desde abajo, y de como la justicia de todos es libertad para cada uno, en Italia como en todo el mundo.