La comandante Nestora Salgado García, integrante de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias en La Montaña de Guerrero, hizo un llamado a la población de Olinalá mediante una carta en la que expresó que la lucha por la defensa de los derechos humanos continúe, pero además, que el pueblo en general no se olvide de brindar el apoyo por conseguir su libertad después de dos años de presa política.
A continuación carta íntegra de Nestora Salgado, desde la cárcel de Tepepan.
Carta a la libertad
En esta fecha, 27 de octubre de 2015, a tres años del ejercicio civil de autoprotección que llevo a cabo una gran parte de la población de Olinalá, frente a los hechos violentos, las amenazas, las llamadas de extorsión, los homicidios que iban aumentando en el pueblo, le hago un llamado a las olinaltecas y olinaltecos a no olvidar, a no olvidarme.
Este llamado es primero para que recuerden ese 2012 y piensen en lo que necesitaba Olinalá y sus pueblos, rememorar las condiciones en que ocurrió el alzamiento contra la delincuencia y la posición que se me hizo tomar, ahora, necesito su respaldo, su aliento de esperanza, su clamor de libertad.
En Olinalá se evitaron muertes, abusos, entonces, si hubo apoyo ¿porque ahora pueblo no toman las riendas del asunto ¿dónde están ahora que los necesito? ¿porqué si hicieron la imagen de mí y decían que fuera yo la que diera la cara porque me abandonan? Ciudadanos, la instalación de barricadas, las noches de desvelo, las asambleas, las personas adultas que empuñaron su arma del campo, la necesidad de insistir en que el pueblo quería ayuda de cuerpos de seguridad no corrompidos y después de autoprotegerse y vigilarse en un sistema de justicia comunitario,no fueron cuestiones de capricho ni rebeldía, se estaban viviendo unas circunstancias terribles por lo que en un arrebato de desesperación mucha gente participó para el bien común, sin embargo ahora estoy pagando la decisión de muchos habitantes que ahora se han desentendido del movimiento, yo les reitero el llamado a la unidad.
Nestora no organizó todo, eso es claro, sin embargo en las asambleas había gritos, que se siguiera topara donde topara, tu Nestora, yo solo era la representación, la mensajera de la población olinalteca, con el tiempo había amenazas, intimidaciones pero no me fui ni me escape de la realidad, lo que me está costando una prisión injusta plagada de venganza de políticos perversos e ineficiencia en el manejo del caso por parte de la Fiscalía. Señores, señoras, no me he tumbado, si me canso porque han sido días sin sol, días lejos de mis nietos, días completos esperando a los acusadores que no llegan, que no se han presentado, yo me pregunto, ¿de qué se trata esta estrategia? ¿cuál es su intención? ¿porqué ese abuso contra una mujer? Somos seres humanos, si tienen algo que decir que lo digan y no intenten doblegarme en momentos difíciles.
El saber plenamente que soy inocente de los delitos que me acusan me da fortaleza, Dios sabe que soy inocente, que más que la verdad pero la pregunta es ¿hasta cuando durará esta injusticia? No me arrepiento porque no hice un mal, vi que estaban pasando cosas terribles a mis paisanos y no esperé a que me pasara. En esta carta no hay rencor, hay palabras que buscan su corazón, su mente y su memoria, no de dádiva, sí de justicia y solidaridad.
Debo mencionar que en este tiempo he recibido mensajes de respaldo e diversas organizaciones sociales, de personas con un espíritu enorme de lucha y convicción, que supe que 500 mujeres feministas firmaron un documento en el que demandan mi libertad, así como también, acudió a visitarme Fran Heinrich, diputado del Parlamento Federal de Alemania quien acudió a solidarisarse conmigo, entonces pueblo, si lo vivieron en carne propia la violencia, ¿porqué se han quedado callados? ¿porqué no apoyarme en esta lucha por mi libertad y la de los otros compañeros comunitarios que cumplían con una labor asignada por sus comunidades de origen?.
En este lugar, las reflexiones abundan, a veces me pregunto ¿qué pasó con la CRAC en tanto tiempo? Yo confié en el reconocimiento que tendría la Policía Comunitaria de Olinalá, ¿dónde esta el cobijo y respaldo de San Luis, Ayutla…? Yo les propongo que no se duerman en sus laureles porque no se sabe que pasará con la represión y la creación de cargos fabricados que genere algún mal gobierno o personas que son corruptas y malas. Por eso hoy, los llamo a una necesaria unión alternativa entre los pueblos, no hay de otra, el trabajo desde los pueblos y para los pueblos.
Asimismo quiero enviar un mensaje de solidaridad a Karla Castañera, madre de familia que se puso en huelga de hambre frente al Consulado Mexicano en Estados Unidos para exigir la presentación de su hija que desapareció hace siete años a la edad de 13 cuando salió a comprar zapatos para su escuela. Karla, te envío mi respeto, estoy contigo de verdad, y también con tantas miles de personas que están padeciendo una situación similar, por que no le pasa a pocas personas, son miles, ¿porqué no levantar la voz y apoyar a las víctimas? Cómo no luchar por algo que te rompe el alma cada día y te cala hasta las entrañas, por una hija, por un hijo que es lo más sagrado, soy mujer, soy madre, porqué no entendería la angustia, dolor e incertidumbre de una madre que no sabe si su hija esta comiendo, si pasa frío, o que pasó con ella, en tanto que las autoridades no dan una respuesta.
Debemos recordar también como una desesperación o cansancio llevó a dos madres a las oficinas de la Comunitaria de Olinalá para pedir que se buscaran a sus hijas porque no llegaban a su casa, porque su actitud cambiaba, porque temían que las fueran a desaparecer sin que supieran de ellas.
Muchos problemas hay, no debemos cerrar los ojos, ¿qué esta pasando con la juventud, que caminos están tomando, que opciones tienen para vivir que no sea la violencia y autodestrucción? Esta pregunta es con el ánimo de llegar a su conciencia, si estabamos jalando una cuerda porque soltarla si estamos en resistencia, si debe existir una fuerza recíproca, un círculo constante ante gobiernos que quieren sometimiento a través de la represión, que se escuche la cosigna de lucha, si yo lucho desde adentro ¿porqué afuera no lo habrá de hacer? Por último envío un saludo de respeto y admiración al Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra de Atenco por su incansable lucha por defender el territorio y a todas aquellas personas que están defendiendo la vida, a los seres que habitan en su territorio y que mantienen la firme convicción del respeto a los derechos humanos.
Con cariño Nestora
En esta fecha, 27 de octubre de 2015, a tres años del ejercicio civil de autoprotección que llevo a cabo una gran parte de la población de Olinalá, frente a los hechos violentos, las amenazas, las llamadas de extorsión, los homicidios que iban aumentando en el pueblo, le hago un llamado a las olinaltecas y olinaltecos a no olvidar, a no olvidarme.
Este llamado es primero para que recuerden ese 2012 y piensen en lo que necesitaba Olinalá y sus pueblos, rememorar las condiciones en que ocurrió el alzamiento contra la delincuencia y la posición que se me hizo tomar, ahora, necesito su respaldo, su aliento de esperanza, su clamor de libertad.
En Olinalá se evitaron muertes, abusos, entonces, si hubo apoyo ¿porque ahora pueblo no toman las riendas del asunto ¿dónde están ahora que los necesito? ¿porqué si hicieron la imagen de mí y decían que fuera yo la que diera la cara porque me abandonan? Ciudadanos, la instalación de barricadas, las noches de desvelo, las asambleas, las personas adultas que empuñaron su arma del campo, la necesidad de insistir en que el pueblo quería ayuda de cuerpos de seguridad no corrompidos y después de autoprotegerse y vigilarse en un sistema de justicia comunitario,no fueron cuestiones de capricho ni rebeldía, se estaban viviendo unas circunstancias terribles por lo que en un arrebato de desesperación mucha gente participó para el bien común, sin embargo ahora estoy pagando la decisión de muchos habitantes que ahora se han desentendido del movimiento, yo les reitero el llamado a la unidad.
Nestora no organizó todo, eso es claro, sin embargo en las asambleas había gritos, que se siguiera topara donde topara, tu Nestora, yo solo era la representación, la mensajera de la población olinalteca, con el tiempo había amenazas, intimidaciones pero no me fui ni me escape de la realidad, lo que me está costando una prisión injusta plagada de venganza de políticos perversos e ineficiencia en el manejo del caso por parte de la Fiscalía. Señores, señoras, no me he tumbado, si me canso porque han sido días sin sol, días lejos de mis nietos, días completos esperando a los acusadores que no llegan, que no se han presentado, yo me pregunto, ¿de qué se trata esta estrategia? ¿cuál es su intención? ¿porqué ese abuso contra una mujer? Somos seres humanos, si tienen algo que decir que lo digan y no intenten doblegarme en momentos difíciles.
El saber plenamente que soy inocente de los delitos que me acusan me da fortaleza, Dios sabe que soy inocente, que más que la verdad pero la pregunta es ¿hasta cuando durará esta injusticia? No me arrepiento porque no hice un mal, vi que estaban pasando cosas terribles a mis paisanos y no esperé a que me pasara. En esta carta no hay rencor, hay palabras que buscan su corazón, su mente y su memoria, no de dádiva, sí de justicia y solidaridad.
Debo mencionar que en este tiempo he recibido mensajes de respaldo e diversas organizaciones sociales, de personas con un espíritu enorme de lucha y convicción, que supe que 500 mujeres feministas firmaron un documento en el que demandan mi libertad, así como también, acudió a visitarme Fran Heinrich, diputado del Parlamento Federal de Alemania quien acudió a solidarisarse conmigo, entonces pueblo, si lo vivieron en carne propia la violencia, ¿porqué se han quedado callados? ¿porqué no apoyarme en esta lucha por mi libertad y la de los otros compañeros comunitarios que cumplían con una labor asignada por sus comunidades de origen?.
En este lugar, las reflexiones abundan, a veces me pregunto ¿qué pasó con la CRAC en tanto tiempo? Yo confié en el reconocimiento que tendría la Policía Comunitaria de Olinalá, ¿dónde esta el cobijo y respaldo de San Luis, Ayutla…? Yo les propongo que no se duerman en sus laureles porque no se sabe que pasará con la represión y la creación de cargos fabricados que genere algún mal gobierno o personas que son corruptas y malas. Por eso hoy, los llamo a una necesaria unión alternativa entre los pueblos, no hay de otra, el trabajo desde los pueblos y para los pueblos.
Asimismo quiero enviar un mensaje de solidaridad a Karla Castañera, madre de familia que se puso en huelga de hambre frente al Consulado Mexicano en Estados Unidos para exigir la presentación de su hija que desapareció hace siete años a la edad de 13 cuando salió a comprar zapatos para su escuela. Karla, te envío mi respeto, estoy contigo de verdad, y también con tantas miles de personas que están padeciendo una situación similar, por que no le pasa a pocas personas, son miles, ¿porqué no levantar la voz y apoyar a las víctimas? Cómo no luchar por algo que te rompe el alma cada día y te cala hasta las entrañas, por una hija, por un hijo que es lo más sagrado, soy mujer, soy madre, porqué no entendería la angustia, dolor e incertidumbre de una madre que no sabe si su hija esta comiendo, si pasa frío, o que pasó con ella, en tanto que las autoridades no dan una respuesta.
Debemos recordar también como una desesperación o cansancio llevó a dos madres a las oficinas de la Comunitaria de Olinalá para pedir que se buscaran a sus hijas porque no llegaban a su casa, porque su actitud cambiaba, porque temían que las fueran a desaparecer sin que supieran de ellas.
Muchos problemas hay, no debemos cerrar los ojos, ¿qué esta pasando con la juventud, que caminos están tomando, que opciones tienen para vivir que no sea la violencia y autodestrucción? Esta pregunta es con el ánimo de llegar a su conciencia, si estabamos jalando una cuerda porque soltarla si estamos en resistencia, si debe existir una fuerza recíproca, un círculo constante ante gobiernos que quieren sometimiento a través de la represión, que se escuche la cosigna de lucha, si yo lucho desde adentro ¿porqué afuera no lo habrá de hacer? Por último envío un saludo de respeto y admiración al Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra de Atenco por su incansable lucha por defender el territorio y a todas aquellas personas que están defendiendo la vida, a los seres que habitan en su territorio y que mantienen la firme convicción del respeto a los derechos humanos.
Con cariño Nestora
