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«Hasta la última niña»: Cuba, mejor país de Latinoamérica en oportunidades para el desarrollo de las niñas

Redacción Desinformémonos

Cuba es el país de Latinoamérica con mejores oportunidades para el desarrollo de las niñas y Haití presenta los peores indicadores de la región, informó Teresa Carpio, asesora de gobernabilidad para América Latina y el Caribe de “Save the Children”.

México ocupa el lugar 56, en donde los indicadores sobre el incremento en el  matrimonio infantil y el embarazo adolescente, así como la poca oportunidad de participación de las mujeres en la vida parlamentaria son preocupaciones de las que se debe ocupar el diseño de la política social.

Esta situación fue valorada a partir de un informe presentado el 11 de octubre pasado por Save the Children, que analizó el desarrollo de las niñas en 144 países y determinó que la clasificación la encabeza  Suecia, Finlandia y Noruega, mientras que los países con menos oportunidades para las niñas son la República Centroafricana, Chad y Níger.

El estudio “Hasta la última niña” sitúa a Cuba en la posición 34 del índice internacional, por encima de Japón (35), la tercera economía mundial, y de Bolivia (45) y Chile (48), mientras que Haití aparece en la plaza 105, por detrás de Brasil (102) y Guatemala (103).

Carpio explicó que el índice se elaboró a partir de los indicadores de cada país en matrimonio infantil, fertilidad adolescente, mortalidad materna, mujeres parlamentarias y culminación de los primeros años de secundaria.

La asesora remarcó que la violencia es la principal barrera en Latinoamérica para el desarrollo de las niñas, especialmente entre las indígenas y afrodescendientes.

Indicó que, en países como Perú, el 60  por ciento de los embarazos adolescentes es producto de una violación, y entre el 80 y 85 por ciento  de las jóvenes embarazadas abandona la escuela.

Otra característica generalizada en Latinoamérica es el castigo “físico y humillante, que se da cotidianamente en hogares y escuelas”, a pesar de que ya esté prohibido en once países de la región, y que disminuye en un 5 por ciento el coeficiente intelectual respecto de otros niños bien tratados, valoró Carpio.

“El principal aporte de nuestro informe es que la violencia es una característica que nos está persiguiendo en toda la región y no estamos haciendo casi nada para resolverlo”, recordó.

La asesora de gobernabilidad de Save the Children valoró que Cuba mantiene una política sostenida en educación y salud de carácter público, gratuito y obligatorio, los padres tienen vínculos afectivos más fuertes con sus hijos y existe una fuerte represión contra la violación sexual a niños.

Carpio lamentó que en Brasil no haya ninguna política pública que ponga al niño en el centro de la misma, aunque destacó que “se han dado cosas muy interesantes como campañas para estimular a los alcaldes a invertir en la niñez, con programas como la disposición de autobuses gratuitos para que los niños vayan a la escuela”.

La especialista criticó que esta medida no sea acogida por autoridades locales de las zonas rurales de Bolivia, Colombia, Ecuador, Guatemala y Perú, donde detalló que las adolescentes no van a la escuela porque no tienen a su disposición servicios higiénicos.

La experta recomendó a los países que continúen la inversión en educación, salud y protección de la violencia con políticas de prevención, así como iniciativas para evitar que las adolescentes embarazadas abandonen la escuela.

“No puede continuar la doble acción por parte de los Estados, que por un lado vacunan a las niñas contra el virus de papiloma humano y por otro les prohíben acceder a servicios de salud sexual y reproductiva sin el permiso de sus padres”, enfatizó Carpio.

En Latinoamérica hay 166 millones de adolescentes y jóvenes entre los 10 y 24 años de edad, lo que supone el 26 por ciento de la población de la región.

El informe Hast la Última Niña, libres para vivir, libres para aprender, libres de peligro. 

Si el mundo quiere cumplir con su compromiso de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de no dejar a nadie atrás, tenemos que luchar contra la exclusión y la discriminación que deja atrás a muchos grupos de niños y niñas. Por eso, y con el objetivo de analizar y visibilizar la situación de las niñas, en Save the Children publicamos el informe «Hasta la última niña: Libres para vivir, libres para aprender, libres de peligro». Son muchas las barreras que tienen que atravesar las niñas, algunas de las más importantes arrojan datos a la luz que muchos preferirían no tener que ver.

Matrimonio infantil

Cada siete segundos una niña menor de 15 años contrae matrimonio. De las mujeres que habitan hoy el mundo, más de 700 millones se han casado antes de los 18 años y una de cada tres de esas mujeres se casaron antes de la edad 15. El matrimonio infantil pone en marcha un ciclo de marginación que niega a las niñas sus derechos más básicos, como la educación o la propia libertad. Las niñas que contraen matrimonio a una edad demasiado temprana generalmente no pueden ir al colegio y quedan más expuestas a situaciones de violencia doméstica, abusos y violaciones. Se quedan embarazadas y corren riesgo de contraer enfermedades de transmisión sexual y VIH. Además, dan a luz cuando sus cuerpos no están completamente desarrollados para ello, lo que puede tener graves consecuencias para su salud y la del bebé.

Violencia de género

Se estima que 30 millones de niñas corren el riesgo de ser víctimas de una mutilación genital femenina en la próxima década. Las adolescentes son más propensas a sufrir actos violentos como la violencia sexual que los chicos. De hecho 2,6 mil millones de niñas y mujeres viven en países donde la violación dentro del matrimonio no está tipificado como un delito. La violencia física, sexual y psicológica por motivos de género pueden tener lugar en el hogar, en las escuelas o dentro de las comunidades. Este tipo de violencia tiene sus raíces en la discriminación y la exclusión.

Acceso a sistemas sanitarios

La mortalidad materna es la segunda causa principal de muerte en las adolescentes de 15 a 19 años de edad (después del suicidio). Cada año, 2,5 millones de niñas menores de 16 años dan a luz. Una situación que puede ser especialmente peligrosa si no se cuenta con un sistema sanitario que asegure el bienestar de la menor. Se estima que 70.000 adolescentes mueren cada año debido a complicaciones durante el embarazo o en el parto.

Exclusión económica

Cuando los recursos del hogar son limitados, las normas sociales en muchos lugares dictan que se debe dar prioridad a los niños, dejando a las niñas con menos oportunidades para continuar con su educación o con mayor dificultad para cubrir necesidades básicas como la alimentación. Muchas niñas ni van a la escuela ni tienen un trabajo remunerado.

Brecha educativa

A nivel mundial, 62 millones de niñas no van a la escuela. En los países donde el nivel de educación promedio es bajo, las mujeres y las niñas más pobres son las que se encuentran en una situación peor. Las niñas se enfrentan a mayores barreras para recibir una formación, tanto en la familia como en la propia escuela, como la dificultad para pagar la matrícula, que las familias prioricen la educación de los varones sobre las niñas o escuelas inseguras donde las niñas puedan ser objeto de violencia o acoso sexual.

Situación de conflicto

Las mujeres y las niñas son mucho más vulnerables en situación de conflicto o los desastre natural. Por ejemplo, como resultado de los «mecanismos negativos de supervivencia», como el matrimonio infantil, durante el brote de Ébola en Sierra Leona, hubo un fuerte aumento de los embarazos en la adolescencia: se calcula que más de 14.000 adolescentes que quedaron embarazadas durante el brote. Una de cada cuatro adolescentes refugiadas sirias es obligada a casarse.

Trata con fines de explotación sexual

Niñas que, en busca de una vida mejor, acaban siendo engañadas y empujadas a realizar trabajos forzados o con fines de explotación sexual. De los 21 millones de víctimas del trabajo forzoso en todo el mundo, poco más de un cuarto (26%) son niños. Las niñas se ven mucho más afectadas afectadas, sobre todo por la explotación sexual forzada.

Con información e indicadores de la Fundación Save the Children: Hasta la última niña 

Cuadro de índice de oportunidades para las niñas: 

file:///Users/ligia/Documents/2016%20Nin%CC%83as%20indice_de_oportunidades_para_las_ninas_save_the_children.pdf

foto: Cubadebate 

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