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La importancia de la Educación Intercultural en la Constituyente de la Ciudad de México

Omar Cruz

La siguiente reflexión gira en torno a la problemática de la educación intercultural en las grandes ciudades como es el caso de la Ciudad de México; al realizar una breve lectura del sistema educativo mexicano encuentro que la educación que se imparte en la ciudad llega a ser excluyente e inadecuado para la preservación de la cultura, la identidad y de muchas lenguas indígenas que están presente en la urbe, por tanto, cuando hacemos mención de una educación que tendría que ser pertinente para indígenas residentes en la ciudad, encuentro que no la hay y así surgen varios cuestionamientos, y expongo el siguiente, ¿Qué educación están recibiendo los indígenas en la Ciudad de México y cuáles son los fines del mismo?

Al migrar y posteriormente asentarse en un contexto desconocido o ajeno a la realidad de muchas comunidades indígenas, significa conocer otra realidad y al mismo tiempo aprender nuevos conocimientos del lugar, se genera un choque cultural entre lo rural y lo urbano, ya que las escuelas del medio urbano corresponden a otra necesidad de enseñanza, como aprender en español u otras lenguas extranjeras, y con ello se excluyen la lengua materna de los indígenas, por lo tanto significa la pérdida de la misma y la degradación de su cultura e identidad, haciendo que se complique la socialización.

Por lo anterior es de suma importancia identificar cómo atiende el sistema educativo mexicano situaciones como el de los indígenas residentes de las grandes ciudades, debido a que en las ciudades se impone la homogenización, siendo ello una problemática central y de mucha importancia sobre todo cuando hacemos señalamiento de la Ciudad de México, al ser un punto en donde convergen diversas culturas. No obstante, la ciudad tendría que incluir a toda esa diversidad en sus nuevas leyes, atendiendo así las necesidades de cada cultura. Debido a que, en las últimas décadas del siglo XX la urbe es la receptora más importante de migrantes indígenas, eso lo podemos comprobar ante la presencia lingüística y cultural de muchos pueblos indígenas en la CDMX, con sus múltiples expresiones culturales unas ya no reproducidas como se haría en sus lugares de origen, otras más que sufren cambios al relacionarse con el medio urbano, otras más se mezclan con diversas culturas, generando así nuevas expresiones culturales.

Ante situaciones diversas y complejas, queda la tarea pendiente de la Secretaria de Educación Pública, así como del gobierno de la CDMX, hacer cumplir el mandato de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos en su artículo 3o, así también el artículo 2º de la Carta Magna, el Convenio 169 de la OIT sobre Pueblos Indígenas y Tribales en Países Independientes, la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas, ya que la Ciudad de México consta de una composición pluricultural sustentada en sus pueblos indígenas, por lo tanto, debe darse el énfasis en el tema de la educación para atender a las culturas indígenas, así como la preservación de las lenguas, conocimientos y todos aquellos elementos que constituyan su cultura. Porque la CDMX, es un contexto donde las culturas indígenas y no indígenas se relacionan cultural, social y económicamente y no deberían los pueblos indígenas encontrarse en un rezago educativo, económico, ni discriminados, ni segregados.

En ese tenor, la ciudad se ve como un lugar modernizado y desarrollado, al mismo tiempo es un espacio de desigualdad social entre las personas que la habitan, pues existe el crecimiento de la ciudad por causa de la migración y su característica es tener periferias pobres y extensas.

Ante una situación de exclusión que viven muchas familias indígenas, la educación oficial que se imparte en contexto urbano tiene retos muy importantes, por ejemplo: que no existe una capacitación que ofrezca una educación adecuada para la preservación de la historia, la cultura, la lengua e identidad de los pueblos indígenas, es decir, no corresponde a una enseñanza multicultural que sería de suma importancia para identificar y valorar las múltiples identidades concentradas en la CDMX.

Entonces, ¿Qué sucede con el proceso de enseñanza-aprendizaje de los indígenas en la Ciudad de México?, en estos casos ¿El sistema educativo mexicano es responsable que los indígenas pierdan sus lenguas maternas? Ante los cuestionamientos, es importante describir algunos episodios dentro de la historia mexicana que han puesto énfasis en la homogenización de la educación, ya que a partir de la Revolución Mexicana se tomó el castellano como la lengua nacional, de esta manera la escuela surge como el primer espacio para castellanizar y alfabetizar, como si no hubiera una visión para la educación en el campo, para una educación que correspondiera a las diferencias del país. Como muestra de esto “…en 1911 se aprueba la Ley de Instrucción Rudimentaria, que establece para toda la república, escuelas cuyo objetivo era enseñar a los indígenas a hablar, leer y escribir en castellano…” (García, 2004: 64).

La CDMX, participa en ese proceso creando en los años veinte la Casa del Estudiante Indígena cuyo objetivo era reunir en una sola institución a los jóvenes indígenas de diversos pueblos, para enseñarles la educación predominante en el país que consistía en el habla sólo del castellano. Entonces, ¿Dónde queda el derecho a la pluriculturalidad dentro de la ciudad? pareciera que esto es un proceso inalcanzable dentro de las escuelas de la ciudad.

Por lo tanto, es pertinente hablar y concretar con una formación intercultural en la CDMX, entendiendo que la interculturalidad es: aquella que“…intenta romper con la historia hegemónica de una cultura dominante y otras subordinadas y, de esta manera, reforzar las identidades tradicionales excluidas para construir, en la vida cotidiana, una convivencia de respeto y de legitimidad entre todos los grupos de la sociedad…” (Walsh, 1998). La de garantizar el derecho de todos aquellos que sean residentes en la Ciudad, y que atienda la demanda de una educación que respete y sea incluyente de las culturas originarias de este país, considerando que la interculturalidad ha sido practicado por los pueblos indígenas por siglos y en permanente resistencia ante los embates de un pensamiento occidental dominante.

Es tener la claridad que una educación intercultural en la CDMX, sería aquella encargada de romper con la educación tradicional de instrumentación enfocada en una sola realidad que es la urbana, para poder dar paso a la redefinición de una educación clara y pertinente para las culturas indígenas y no indígenas residentes de la ciudad, en la cual se tomarán en cuenta su lengua materna y su propia identidad, siendo una educación que incluya en vez de excluir, a pesar de las diferencias sociales, sería estar y convivir en un mismo espacio aceptando y disfrutando de la diversidad cultural, todos aprendiendo de todos.

Es dar los primeros pasos para aceptar y fomentar una educación intercultural acorde y representativa de nuestra realidad.

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