Fuerzas israelíes han herido a más de 170 civiles durante manifestaciones pacíficas a favor de los palestinos que sufren represión en las cárceles israelíes.
Pese al fuerte despliegue de las tropas israelíes, los palestinos han realizado este viernes multitudinarias marchas en Al-Quds (Jerusalén) y Cisjordania, en respuesta a los llamados de los movimientos de Resistencia palestina contra las medidas de represalia del régimen de Tel Aviv hacia los prisioneros y las familias de los presos que escaparon el 6 de septiembre de una cárcel israelí.
Similares manifestaciones se han organizado en la Franja de Gaza y Beta, al sur de la ciudad de Nablus, ubicada en la Cisjordania ocupada, donde los soldados sionistas han reprimido a los manifestantes con gases lacrimógenos y munición real. Los ataques de los uniformados israelíes han dejado más de 170 civiles heridos, tal como ha informado la Media Luna Roja Palestina.
En estas marchas, que se han celebrado en toda Palestina ocupada, los participantes han coreado consignas en apoyo de la Resistencia y en solidaridad con los presos que todavía están encarcelado en los centros penitenciarios israelíes.
En la Mezquita Al-Aqsa, los manifestantes portaban cucharas, la herramienta con la que los reos excavaron el túnel en la carcel de Giboa para huir.
El mismo viernes, en su búsqueda de los fugitivos, el ejército israelí ha arrestado a dos hombres y una mujer, todos hermanos de Mahmud Ardah, el presunto autor intelectual de la fuga, en la aldea de Arraba, en la ciudad cisjordana de Yenin, en el norte de la ocupada Cisjordania. Otros familiares fueron arrestados el miércoles y siguen encarcelados.
El 6 de septiembre, los seis encarcelados palestinos pudieron escaparse de la presión de Gilboa, un centro penitenciario de máxima seguridad del régimen israelí, gracias a su ingenio y tesón mostrado a la hora de cavar un túnel que les ha permitido salir de su cautiverio sobre las 3:25 de la madrugada de este lunes (hora local).