Cine para ver

Alberto Cortés

Historias de impunidad

Historias de impunidad

A diez años de los trágicos sucesos de mayo en Atenco, existe una iniciativa para producir una serie de documentales que sirvan para reflexionar, festejar, señalar, conmemorar, hacer memoria o lo que se quiera en torno a esta organización; el Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra: #Atenco10X10.

Durante estos diez años, México se ha convertido en el lugar donde suceden las peores catástrofes en relación a los derechos humanos, la violación a estos es cosa de todos los días, en cualquier lugar, a cualquier hora, en la extensión completa del territorio nacional, pueden suceder con vigilancia, o sin ella, con cámaras de seguridad filmando, o celulares indiscretos, esa violencia es parte de lo cotidiano en esta crisis humanitaria que todos vivimos, pero que no todos la hemos padecido de igual forma. Somos testigos de la forma en que se vulgarizan las escenas de tortura hasta hacernos insensibles a mirarlas. Son imágenes que han sido grabadas, manipuladas, y luego ampliamente difundidas por alguien, con intenciones poco claras pero ahí están.

Mientras tanto el responsable de las fuerzas armadas se disculpa, el gobierno y los medios celebran el gesto. Pero no queda claro ¿a quién le pide disculpa?, lo que sí queda claro es que lo hace ante miles de soldados, formados muy ordenaditos y pretenden convencernos que la tortura es como un caso aislado de ovejas descarriadas, reprobable y de fácil solución, se pide perdón y ya está.

En Atenco, esos primeros días de mayo del 2006, se dieron los hechos represivos con muchas formas y comportamientos que ahora son parte de la vida diaria. Mujeres violentadas, jóvenes muertos, encarcelamiento, tortura, abusos policíacos, impunidad.

Los atenquenses no olvidan, siguen en lucha, exigiendo justicia por todo lo sucedido, castigo a los culpables, respeto por la tierra. Se lo dijeron en su cara a Peña Nieto cuando era candidato en mayo del 2012 en el Castillo de Chapultepec.

Este 3 de mayo, estos incansables luchadores sociales marcharon primero en Atenco, luego se movilizaron al Ángel de la Independencia para de nuevo marchar hasta el Zócalo de la Ciudad de México.

Hicieron su entrada a la plaza mayor justo después que un grupo de soldados bajara la gran bandera nacional con su protocolo castrense y banda de guerra.

Los del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra entraron como un grupo pequeño, apenas unos cientos, no importa el número, importa la fuerza que los mueve, algunos empuñando sus machetes, hombres y mujeres que han luchado todos estos años y lo traen marcado en su rostro. Con una dignidad que llenaba todo el Zócalo me recordaron a los manifestantes de las películas de Theo Angelopoulos donde comunistas de todos los tiempos se empeñan en manifestarse en las calles, sabedores que tienen la razón y que la historia lo comprobará. Trini lo dice con una sonrisa: hay que hacer algo ¿no?

Otra historia de impunidad es la que nos cuenta la película Las elegidas, actualmente en cartelera.

En el universo de Las elegidas, nadie cuestiona nunca la inutilidad de ir a la policía para arreglar algo. En este caso se trata de impedir el desajuste social que permite robar niñas, privarlas de su libertad, torturarlas para ser usadas como mercancía. Un diálogo de la película escrita y dirigida por David Pablos nos informa sin mayor dramatismo que, ¨de nada sirve ir con la policía¨. Este universo, se llama México, esta historia se desarrolla en Tijuana, pero bien puede ser cualquier otra ciudad del país.

Las elegidas muestran un posible destino al que se enfrentarían algunas de las mujeres que engrosan las estadísticas de desaparecidas. Chicas que desaparecen de su mundo y vida para aparecer en otro, uno donde lo primero que pierden es el nombre y lo primero que aprenden es a ofrecer su piel.

Una gran virtud en la narrativa cinematográfica y estética es que evita la mirada erótica y la sensualidad de las chicas, permitiendo un distanciamiento Brechtiano para entender esta problemática dramática sin sentimentalismos o lugares comunes de la sensualidad femenina. Es un trabajo muy honesto por parte de los realizadores, se nota una investigación y una muy buena imaginación para atraparnos en esta devastadora historia de machismo y delincuencia organizada.

Muy pronto los cortos de Atenco se podrán ver en #Atenco10X10.

Las películas de Theo Angelopoulos están disponibles en la red.

Las elegidas está actualmente en cartelera.

Alberto Cortés

Director de cine ganador en tres ocasiones del premio Ariel. Egresado del Centro Universitario de Estudios Cinemátográficos, entre sus películas y documentales se encuentran Amor a la vuelta de la esquina, Ciudad de Ciegos, Corazón del Tiempo, La tierra de los Tepehuas, Resistencia…somos gente del maíz, entre otros.

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