Los trabajadores del diario Tiempo Argentino sufrieron esta madrugada del lunes 4 de julio, el ataque de un grupo de veinte personas que con lujo de violencia ingresaron a la redacción a golpes y patadas contra las personas que se encontraban en el lugar. Destrozaron pertenencias de los trabajadores, las instalaciones del medio y documentos de la cooperativa en el sector de recursos humanos. Con gritos y más golpes amenazaron a trabajadores: “salgan por las buenas o van a salir por las malas” les dijeron. El grupo está identificado con el empresario Mariano Martínez Rojas, a quien la fiscalía ya citó a declarar.
Luego de los forcejeos, los trabajadores de Tiempo Argentino salieron del edificio y dentro quedaron los agresores. Al paso de las horas, trabajadores de prensa de varios medios llegaron al lugar para acompañarlos y bajo la lluvia esperaron que amaneciera y llegara la orden judicial para recuperar su espacio laboral.
El grupo violento responde al empresario Mariano Martínez Rojas, quien se adjudica la compra del diario Tiempo Argentino y Radio América al empresario Sergio Szpolski. Martínez Rojas ya fue imputado por la fiscal Verónica Andrade. Tras los brutales hechos y destrozos, el personal de seguridad del diario se dirigió a la Comisaría 31, donde la fiscal Andrade ordenó de forma inmediata la consigna policial para asegurar el lugar y el desalojo del empresario Martínez Rojas y su grupo, a quienes responsabiliza del delito de usurpación y daños.
La fiscal aseguró a los periodistas de Tiempo Argentino que podían continuar con su actividad, aunque los destrozos en la redacción obliga a la búsqueda de un nuevo espacio para laborar.
Cabe recordar que el conflicto en Tiempo Argentino viene desde el año pasado, luego del conflicto con los empresarios Sergio Szpolski, ex candidato a intendente del Frente para la Victoria, y Matías Garfunkel, quienes dejaron de pagar los sueldos en diciembre, por lo cual los trabajadores decidieron armar una cooperativa y relanzar el matutino.
Aquí algunas imágenes de las condiciones en las que quedaron las instalaciones del diario, tomadas por el mismo personal de Tiempo Argentino:
con información de medios locales argentinos