Foto: Cuartoscuro
La Comisión Estatal de los Derechos Humanos de Jalisco (CEDHJ) constató que Giovanni López, albañil de 30 años de edad asesinado por no usar cubrebocas, fue víctima de tortura y de “ejecución extrajudicial” por parte de la la policía municipal de Ixtlahuacán del Río el pasado 5 de mayo.
De acuerdo con el informe de la Comisión, los policías municipales buscaron “causarle sufrimiento e intimidarlo. Los agentes policiales lo torturaron, violando su derecho a la integridad personal”.
El informe señala que Giovanni López presentó contusiones en ambos ojos, pómulo izquierdo, tórax anterior, parrilla costal derecha, epigastrio y mesogastrio, entre otras, y que el médico de los servicios municipales “recomendó radiografías de cráneo y región abdominal, las cuales no se realizaron”.
Luego de la detención y la brutalidad policial de la noche del 4 de mayo y a pesar de haber sido examinado en los separos, el 5 de mayo Giovanni fue llevado al hospital tras haber pasado la noche golpeado y con complicaciones, pero nunca fue atendido porque el responsable del manejo del paciente informó que el estudio no se realizaría y “se retiraron sin señalar motivo alguno”, según dijo personal del hospital.
En el informe se indica que la detención fue “ilegal y arbitraria” y que se realizó sin tipo penal, es decir, que fue un arresto administrativo.
El asesinato de Giovanni López fue dado a conocer un mes después de los hechos, en medio de las efervescencia por la muerte del afroamericano George Floyd a manos de un policía en Minneapolis, Estados Unidos.
En varios estados del país, pero sobre todo en Jalisco y la Ciudad de México, varias protestas se organizaron para rechazar la discriminación y la brutalidad policial, así como para exigir justicia y un alto al racismo y el clasismo.
Con información de La Jornada