Estudiantes LGBTTTI son ocho veces más vulnerables a violencia

Redacción Desinformémonos

Foto: Chilango

Ciudad de México | Desinformémonos. Los estudiantes de la comunidad Lésbica, Gay, Bisexual, Transexual, Travesti, Transgénero e Intersexual (LGBTTTI) son ocho veces más vulnerables a la violencia y el acoso en los centros escolares de nivel básico, informó Mary Guinn Delaney, especialista regional en VIH/SIDA de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO).

Durante un evento en Santiago, Chile, Guinn Delaney señaló que la educación sexual es relevante y urgente para para la prevención del acoso escolar trans y homofóbico. “Las agresiones se originan mucho más en las escuelas que en sus hogares, fuera del contexto escolar o en sus comunidades y por supuesto es inaceptable”, indicó.

Por lo menos 65 por ciento de los alumnos de todas las regiones del mundo que pertenecen a la comunidad LGBTTTI son víctimas de violencia, abandono, aislamiento o acoso en el contexto escolar, pero lo viven como una realidad cotidiana, expresó.

“El silencio que guardan las personas frente a situaciones difíciles, muchas veces es peor que los mismos actos director de discriminación. Cualquier tipo de violencia constituye un impedimento al ejercicio de derecho a la educación de todos”, añadió.

Por su parte, Esther Corona, coautora de la guía “Taller de Sensibilización para Prevención del Bulling Trans y homofóbico en las escuelas”, manifestó que en América Latina los ataques contra los integrantes de la comunidad LGBTTTI son una realidad, y que la violencia “empieza o se manifiesta por insultos, seguido de agresiones físicas y ocurre en escuelas tanto públicas como privadas”.

“Es una cuestión que puede terminar en la muerte. Los estudiantes con una opción sexual distinta a la heterosexual sufren con mayor intensidad este fenómeno. En México se reporta hasta un 67 por ciento”, aseguró.

Lamentó que el acoso escolar se reconoce únicamente como un problema social en general, pero no el causado contra la comunidad. “La primera consecuencia es la deserción escolar. También muchas veces en la familia existe el conflicto donde no quieren reconocer una orientación una orientación sexual diferente o una identidad genérica diferente. Esto corta las oportunidades de educarse y aprender y se hace muy difícil el acceso a la escuela”, explicó.

Por último, Guinn Delaney indicó que es necesaria la aplicación de políticas adecuadas en la materia tanto a nivel nacional como en el sistema educativo, con el fin de que se erradique el fenómeno a través de la formación docente y el desarrollo curricular.

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