Al menos 2 de los 19 estudiantes del liceo “Confederación Suiza” que habían sido detenidos durante una manifestación en la tarde del miércoles, denuncian haber sido torturados en la comisaría donde los tuvieron retenidos.
Uno de los muchachos, de 16 años, denunció haber sido ahorcado con su propio cinturón en la comisaría 33 de Ñuñoa. Otro fue obligado a desnudarse totalmente en la misma comisaría. También es menor de edad. Otros estudiantes fueron golpeados durante las detenciones.
Al mediodía del miércoles, los estudiantes del liceo Confederación Suiza se manifestaban en rechazo al SIMCE, un sistema de evaluación de resultados de aprendizaje que, desde 1988, se le aplica a los estudiantes chilenos. “Nos hacen competir porque nos quieren dividir” decía la pancarta que encabezaba la manifestación. Al llegar a la esquina de Vicuña Mackenna y 10 de Julio, aparecieron carabineros en moto seguidos por furgones policiales que comenzaron a reprimir a los estudiantes, según el relato de los hechos que reporta Radio Villa Francia, de Chile.
La policía detuvo a 19 de ellos, todos menores de edad y los trasladó a la comisaria 33 de Ñuñoa. Cuando la noticia de la detención corrió, se presentaron en la comisaría la directora del liceo al que concurren los muchachos, así como abogados de la Defensoría Popular y del Instituto de Nacional de Derechos Humanos de Chile (INDH). También acudieron integrantes de la Comisión de Observadores de DDHH de la Casa Memoria José Domingo Cañas de Santiago, que funciona desde 2011.
El grueso de los detenidos fue liberado ese mismo día, salvo uno, al que los carabineros acusan de haber causado daños a un vehículo policial. Los integrantes de los tres organismos de defensa de derechos humanos denunciaron que no se les permitió ver al muchacho detenido y que la imputación que los carabineros le hacen no tiene sustento. Cerca de las siete de la tarde de ayer, el muchacho fue llevado a constatar sus lesiones al Hospital El Salvador y fue liberado recién en la mañana de hoy jueves. La Defensoría Popular logró que no se lo dejara detenido como medida cautelar, aunque el proceso que iniciaron en su contra continúa.
Marta Cisterna, coordinadora de la Comisión de Observadores DDHH de la Casa Memoria José Domingo Cañas, comentó que parte del modus operandi de los Carabineros para cubrir la tortura es la imputación de cargos falsos a las víctimas. Según la misma fuente, la INDH se hará cargo de la denuncia por “tratos apremiantes” a los muchachos detenidos y la Comisión de Observadores hará lo propio ante organismos internacionales. Estos abusos no son algo nuevo en las comisarías chilenas, sino que ya ha sido alertado por este organismo en sus informes a los relatores de la ONU. El punto es que los agentes no pueden ser acusados de “tortura” ya que el delito no está aún tipificado en Chile, garantizando así la impunidad de la práctica. “Este no es el primer caso de tortura que cubrimos, no es un hecho aislado, no es una situación puntual. Aquí hay una política sistemática”, alertó Cisterna.
