Ciudad de México | Desinformémonos. “Esto no ha acabado”, la lucha contra la termoeléctrica de Huexca, Morelos, “no termina con una consulta amañada, ilegal e ilegítima” realizada por el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, declaró Juan Carlos Flores Solís, del Frente de Pueblos en Defensa del Agua y de la Tierra de Morelos, Puebla y Tlaxcala (FPDAT), luego de que el presidente dio a conocer en su conferencia matutina que de acuerdo a sus resultado ganó el “sí” en la consulta celebrada los días 23 y 24 de febrero, con un margen de 59.5%, frente a un rechazo del 40.1%.
Tal como lo reconoció el mandatario, advirtió Flores Solís, “hay varias suspensiones definitivas y varios amparos ganados”, pero, insistió en conferencia de prensa, “lo principal es que la mayoría de los pueblos afectados dijeron no al proyecto” que incluye dos termoeléctricas, un gasoducto y un acueducto. El activista mencionó como ejemplos del rechazo la votación en los municipios de Ayala y Temoac, y comunidades como la de Huexca, entre otras.
“En todo el oriente de Morelos la población dijo “no”, al igual que en varios municipios importantes de Puebla. Vimos como en lugares donde hubo brigadas de información y vigilancia cómo Cuernavaca y Cuautla, estuvo muy peleada la votación, aún cuando no hubo órganos independientes que estuvieran vigilando esta consulta”, señaló Flores. El gobierno federal, indicó, “con esta encuesta no ganó legitimidad”.
En la lectura del pronunciamiento del Frente de Pueblos, se adviertió que “la mayoría votó por él ‘no’ al Plan Integral Morelos”, pero “con población externa al proyecto están suplantando la decisión de las comunidades”. Lo sucedido este fin de semana, remarcaron, “fue una burla para las comunidades afectadas que votaron por él ‘no’. No fue un mandar obedeciendo como dice Obrador, fue mandar a la chingada los derechos de los pueblos indígenas”.
En estos dos días, señaló el Frente, la población se opuso a la termoeléctrica de varias formas: con la protesta contra la instalación de casillas; la realización de asambleas por usos y costumbres de los pueblos; votando por el No; levantando actas de asamblea y actas locales de resultados de las votaciones en cada comunidad; además de informar a la población en las casillas sobre los riesgos del proyecto. “El pueblo habló y dijo no, pero el circo de la consulta ya lanzó sus resultados”.
Ahora, dijeron, “falta que callen a los pueblos zapatistas de Morelos, Puebla y Tlaxcala, que históricamente no se han callado cuando el gobierno falla”. Teresa Castellanos, de la comunidad de Huexca, advirtió que los pueblos del oriente del dejaron muy clara su postura en contra de la termoeléctrica y dijeron “no” justo en los municipios afectados como Tetela del Volcán, Ocuituco, Zacualpan de Amilpas, Temoac, Jantetelco, Jonacatepec, Tepalcingo, Cuautla, Ayala, se votó en contra del PIM.