Los días 5 y 6 de julio se realizó el 9no Congreso Ordinario de la Federación Nacional Campesina, una de las más importantes organizaciones campesinas del país, bajo el lema “Reforma Agraria y Soberanía Nacional” los militantes de la agrupación debatieron sobre el presente y las luchas que vendrán.
El encuentro fue propicio también para conmemorar los 32 años de vida institucional de la FNC que a lo largo de su historia ha conquistado miles de hectáreas de tierras disputadas al agronegocio para garantizar el arraigo y la producción campesina.
“Sentimos la necesidad de encontrarnos a debatir con la presencia de más de 500 delegados y delegadas de los diferentes Departamentos del país, abordamos cuatro puntos principales: los desafíos ante el nuevo gobierno, lo relacionado a tierra y producción campesina, la situación de la mujer campesina y la realidad de las comunidades indígenas” señala Teodolina Villalba, la primera Secretaria General del gremio campesino que cumplió sus funciones por 11 años seguidos y hoy da paso a una nueva conducción encabezada por Marcial Gómez y Sonia Acevedo, dirigente del Departamento de Canindeyú.
“Lo que rescatamos es la necesidad de la unidad para defendernos como sectores populares, sabemos que para el nuevo gobierno los campesinos, los indígenas, y los sectores sociales en general no existimos, estamos excluidos; ya sabemos que la política del Estado no va a ser favorable al pueblo, sino todo lo contrario” señaló la referente campesina.
Respecto a las futuras medidas del gobierno de Santiago Peña, la dirigente campesina adelantó que ven con preocupación que existe una voluntad política de legalizar las tierras malhabidas, “ya están hablando nuevamente de impulsar el SINACARE/DINACARE que es una forma de legalizar más de un millón de hectáreas malhabidas, también hablan de eliminar el INDERT” mencionó con preocupación. Al mismo tiempo cuestionó la designación de Enrique Riera, autor de la ley que criminaliza la lucha por la tierra, como nuevo Ministro del Interior “el ya está hablando de reprimir los cierres de ruta, las ocupaciones de tierra, van a apuntar a la represión”, concluyó.
Como síntesis de los desafíos que se vienen a nivel país la FNC destaca que “vivimos en una época de profunda crisis y de conmoción política en nuestro país y en el mundo, donde la clase dominante busca eliminar cualquier conquista de derechos de las trabajadoras y trabajadores, profundizando medidas represivas y de criminalización contra el pueblo”. Ante esto, “es fundamental fortalecer nuestras organizaciones y unirnos para avanzar en la lucha por la defensa de la soberanía, la reforma agraria y el desarrollo con justicia social” sostiene la combativa organización campesina.
Publicado originalmente en BASE-IS