Fotos: Amehd Coca Castillo
Ciudad de México | Desinformémonos. El barco zapatista La Montaña, con el Escuadrón 421 a bordo, zarpó rumbo a Europa un día antes de lo previsto desde Isla Mujeres, Quintana Roo. La delegación maya visitará más de 30 países en Europa para dialogar y encontrarse con diversos colectivos.
«Nuestros delegados llevan un corazón grande. No sólo para abrazar a quienes en el continente europeo se rebelan y resisten, también para escuchar y aprender de sus historias, geografías, calendarios y modos», declaró el subcomandante Moisés, jefe militar y vocero zapatista, quien los acompañó en su recorrido desde Yucatán hasta que partieron. «Yo voy en el siguiente», dijo.
Las siete personas miembros del Escuadrón 421 iniciaron su viaje transatlántico con el puño izquierdo en alto. «Con el cerco de paramilitares que los acosa en sus territorios, con las carencias que todos tenemos y los problemas de sus propias comunidades, ellas y ellos lograron organizarse para agarrar un barco y ¡‘ámonos!», dijo Marisela Mejía del Concejo Indígena de Gobierno y de la comunidad otomí que tomó las instalaciones del Instituto Nacional de Pueblos Indígenas (INPI) en la Ciudad de México desde el pasado 12 de octubre.
Después de que en 1994 el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) tomó las armas en Chiapas, hoy «toman el mar», comentó la representante de la comunidad otomí radicada en la Ciudad de México, para buscar en el continente europeo «no la diferencia, mucho menos el perdón y la lástima, sino lo que nos hace iguales».
Los zapatistas escribieron en Una Declaración por la Vida que los lleva «la convicción de que son muchos los mundos que viven y luchan en el mundo. Y que toda pretensión de homogeneidad y hegemonía atenta contra la esencia del ser humano: la libertad. La igualdad de la humanidad está en el respeto a la diferencia. En su diversidad está su semejanza.»
Simultáneamente, en diversas ciudades del mundo se realizaron actividades de despedida a la comitiva rebelde, que busca «realizar encuentros, diálogos, intercambios de ideas, experiencias, análisis y valoraciones entre quienes nos encontramos empeñados, desde distintas concepciones y en diferentes terrenos, en la lucha por la vida.»
Buen viaje y de antemano estamos conscientes que sabrán cumplir con dignidad, los compromisos que con ustedes mismos han contraído. VIVA EL EZLN.
Jamás hubiese pensado en esta forma de hacer política para recuperar la HUMANIDAD