Foto: Cuartoscuro

Ciudad de México | Desinformémonos. Cada día 300 haitianos llegan a México con la esperanza de cruzar a Estados Unidos desde Tijuana, los cuales se suman a los más de 9 mil migrantes de Haití y África que se encuentran en busca de un lugar en los centros de alojamiento de Baja California, señaló Wilmer Metelus, presidente del Comité Ciudadano en Defensa de Naturalizados y Afroamericanos.

Los alojamientos en Tijuana para los migrantes se encuentran sobrepoblados, por lo que varios de los solicitantes de asilo para vivir en Estados Unidos se ven en la necesidad de dormir en comedores públicos, casas e incluso calles.

Gran parte de los haitianos que llegan a Baja California vienen desde Colombia, Venezuela, Ecuador y Bolivia, pues es donde residían luego del temblor del 2010 que terminó con la vida de más de 200 mil personas y redujo a escombros gran parte del territorio nacional. Sin embargo, por las crisis económicas que atraviesan dichos países los haitianos perdieron sus trabajos, lo que los motivó a trasladarse a Estados Unidos. Por otro lado, Brasil les ofreció empleo en las construcciones para las Olimpiadas que se celebraron en Río este verano, pero luego de que concluyeron, fueron despedidos.

De la misma forma, mexicanos guerrerenses y michoacanos forman parte del grupo de migrantes en Tijuana, y también se ven obligados a dormir en las calles por la falta de espacio en los centros migratorios. Hasta el 4 de octubre, eran al menos 300 mexicanos que durmieron a la intemperie a la espera de ser atendidos por las autoridades migratorias estadounidenses.

Por su parte, Estados Unidos anunció la suspensión temporal de las deportaciones de haitianos que se encuentren “ilegalmente” en el país debido a la catástrofe que provocó el huracán Matthew, pero aseguró que después de que las condiciones mejoren, se reanudará la política migratoria.

Además, en Chiapas más de 20 mil migrantes africanos permanecen varados en la estación migratoria de Tapachula, donde buscan un salvoconducto para que transiten libremente por el país y así lleguen a Estados Unidos.

Con información de La Jornada