Foto: Maya Goded / Hablan los pueblos
Ciudad de México | Desinformémonos. “¿Por qué no nos preguntaron si queríamos el Tren Maya?”, “¿por qué solamente se habla de los beneficios y no de los perjuicios del tren?” y “después de la consulta, ¿quién tiene la última palabra?” son algunas de las preguntas que integrantes de comunidades mayas realizaron durante el foro «Encuentro en Defensa de la Vida y el Territorio» el pasado 8 de diciembre en San Antonio Ebulá, Campeche, donde discutieron la consulta sobre el Tren Maya que el gobierno federal llevará a cabo los próximos 14 y 15 de diciembre en los cinco estados por los que atravesará el megaproyecto.
A pesar de que desde el 29 de noviembre el gobierno inició con las asambleas informativas sobre el Tren Maya en algunas de las comunidades de la Península de Yucatán, los habitantes “siguen teniendo dudas” respecto al proyecto, el cual prácticamente fue echado a andar sin el consentimiento de los pueblos potencialmente afectados y sin información previa sobre sus implicaciones.
“¿Es cierto que va a venir mucha gente diferente a vivir en mi pueblo o a vivir en mi región sin permiso de la comunidad?”, “¿de dónde sacarán la energía que hará funcionar el tren?”, “¿esta consulta de verdad es previa, libre, informada, de buena fe y culturalmente pertinente?”, fueron algunas de las dudas que se vertieron en el foro, en el que se reafirmó la falta de información en las comunidades.
En el evento, convocado por el Congreso Nacional Indígena – Península de Yucatán, las comunidades aseguraron que “es simulación, no consulta” lo que el gobierno federal lleva a cabo para la aprobación del proyecto y discutieron las problemáticas en sus territorios y las amenazas que representan los megaproyectos para su vida comunitaria.
