Foto: Cuartoscuro
Ciudad de México | Desinformémonos. El desplazamiento de más de 4 mil personas en los municipios de Chenalhó y Chalchihuitán “es una muestra de una problemática más amplia” y requiere una respuesta que provea a las personas afectadas de la seguridad necesaria, una ayuda humanitaria inmediata y culturalmente adecuada, así como la generación de todas las condiciones necesarias para garantizar un retorno seguro a sus hogares, señaló el representante de la Oficina en México del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH), Jan Jarab.
Manifestó su preocupación ante la situación provocada por un conflicto histórico limítrofe entre las comunidades de ambos municipios, y lamentó que los desplazados han sido forzados a enfrentar “condiciones precarias e inhumanas, incluyendo la falta de condiciones adecuadas de salud, la ausencia de un lugar de refugio adecuado y poco o nulo acceso al agua o a la alimentación, además de encontrarse en una situación continua de inseguridad”.
Aseguró que debe lograrse una solución integral y duradera que atienda desde la raíz los problemas estructurales que dieron origen al desplazamiento, cuyo proceso “debería contar con el apoyo y la mediación de las instituciones y las organizaciones de la sociedad civil relevantes”.
Tras la visita de la relatora especial sobre los derechos de los pueblos indígenas, Victoria Tauli-Corpuz, el mes pasado, Naciones Unidas resaltó la obligación del Estado mexicano “de crear las condiciones y proporcionar los medios que permitan a los desplazados internos indígenas el retorno voluntario, con seguridad y dignidad”.
Por su parte, Jarab señaló que el Estado mexicano “debe reconocer el fenómeno de desplazamiento forzado interno y atenderlo de manera estructural, tomando en consideración los diferentes orígenes y consecuencias que cada caso pueda plantear, dando una respuesta institucional y normativa a la problemática y aceptando así su responsabilidad en este tipo de situaciones”.
Frente a la situación, Jarab reiteró su apoyo para solucionar el problema lo antes posible y que la población de las comunidades puedan regresar a sus hogares sin obstáculos.